SKIN © XR3X

Jump to content

* * * * * 1 votos

Los Santos de Athena


  • Por favor, entra en tu cuenta para responder
92 respuestas a este tema

#61 Patriarca 8

Patriarca 8

    Miembro de honor

  • 16,112 mensajes
Pais:
Peru
Sexo:
Masculino
Signo:
Cancer
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 29 febrero 2020 - 13:53

buena pelea contra el santo de plata de Perseo

 

hasta la misma muerte tiene "temor" de llevarse a la protegida de Dohko

 

Deathmask era un psicópata que obtuvo lo que se merecía

 

buen fic


fwoTpjp.pngd2846x5-c33eb060-952a-40e4-b79b-ac99f8b9

 

 

 


#62 Pojoyuelo

Pojoyuelo

    Miembro habitual

  • 50 mensajes
Pais:
Chile
Sexo:
Masculino
Signo:
Virgo
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 02 marzo 2020 - 07:39

11.- Aioria de Leo

 

                Seiya, un joven huérfano, que nació en un pueblo cercano al santuario, se encontraba entrenando con su maestra Marín en el coliseo. Este luchaba incansablemente para ser el nuevo santo de Pegaso. A su lado se encontraba su compañera de entrenamiento, y también discípula de la santo de Águila. Shaina.

  • Con este tipo de fuerza difícilmente serás un santo de bronce Seiya – Le exclama Shaina a su oponente de entrenamiento.
  • Para ti es fácil decirlo, tu ya eres una santo de plata – contesta Seiya repeliendo los ataques de su oponente – No puedo rendirme hasta tener la armadura.
  • Entonces morirás antes de ser uno – Shaina golpea y arroja a Seiya contra unas rocas lastimándolo seriamente.

                En el otro extremo se encontraba Marín, esta observaban a sus alumnos combatir, a su lado un hombre alto, lo acompañaba. Este era el santo de oro de Leo, y compañero de entrenamiento de Marín cuando se formó como santo.

  • ¿Siempre es así de violenta con su compañero de entrenamiento? – Pregunta a Marín
  • Si – Responde Marín – Cuando Seiya era pequeño destruyó la máscara de Shaina en un entrenamiento. Como bien sabes, eso genero una gran rivalidad hacia él. ¿Qué es lo que pasa Aioria?
  • El patriarca está preocupado, tú también lo debes sentir. El cosmos divino de Athena se ha hecho fuerte en estos días. Según el patriarca esta sería Eris. No puedo creer que mi hermano haya llegado tan lejos.
  • Aioria, Aioros hizo lo que creyó correcto. – Contesta Marín – Es imposible que nuestro maestro nos haya traicionado.
  • Vengo con una misión. Marín. – Aioria le entrega un papiro a su compañera – Mañana Seiya tendrá su prueba por la armadura. Luego debes enviarlo a buscar a Athena. Por orden del gran patriarca, debe asesinarla.
  • Pero Aioria… - Marín contesta, sin respuesta de su compañero.
  • ¿Por qué no cumpliste las órdenes del gran patriarca? Seiya – Le contesta Shaina al santo de Pegaso meses después en la entrada del templo de Leo.
  • Shaina… este no es el momento… Athena… -
  • Debiste haberla matado… ahora Aioria te asesinará – Shaina se lanza contra el santo – Pero haré el trabajo antes que él.

                Shaina arremete contra el santo de Pegaso, pero este logra esquivar sus movimientos con relativa facilidad, ante la sorpresa de Shaina. Esta vuelve a golpearlo, pero Seiya le conecta un golpe que la lanza en dirección opuesta.

 

                La santo de Ofiuco no se rinde y vuelve a arremeter contra el santo de bronce, pero es derrotada luego de que Seiya le diera un golpe final. Seiya aprovecha esta oportunidad en donde noquea a su compañero de entrenamiento y se dirige a la entrada del templo de Leo.

  • Shaina trató de Salvarte la vida… Seiya… - Dice una voz correspondiente a Aioria de Leo – Nunca esperé verte aquí como un enemigo. Sé lo mucho que Marín te estima, y por eso haré esto rápido. Me encargaré de tus amigos, de los traidores y de Athena yo mismo.
  • Aioria espera… - Este es golpeado inmediatamente en el estómago por el santo de oro – Primero mi hermano… luego mi compañera… ahora tú… Todos traicionan al santuario. Pero es momento de una amenaza real.

                Aioria golpea durante muchos minutos al cuerpo de Seiya que solo puede reaccionar de forma tardía. El santo de Leo, comienza a masacrar a Seiya, casi jugando con su cuerpo. Hasta que decide lanzarlo contra los pilares del templo.

  • Debo admitir, que jamás pensé que fueras capaz de soportar este castigo. Cualquiera ya hubiera muerto. Pero quizás sea el momento de terminar con todo esto. – Aioria apunta un dedo hacia el pecho de Seiya – Lo siento… Seiya…

                Leo dispara una onda de luz, pero en vez de golpear el cuerpo de Seiya, la luz impacta en la espalda de Shaina. Esta cae en su brazo inconsciente. Leo molesto critica a la santo de Ofiuco por colocarse en su lugar y se prepara nuevamente para dispararle otra onda.

 

                Pero esta vez Seiya si recibe el golpe, pero cubierto de una armadura que brillaba como la luz del sol. Seiya no se había dado cuenta pero en ese momento la armadura de Sagitario había aparecido para detener el ataque de Leo ante la sorpresa de este. Al mismo momento, una imagen de un joven aparece detrás de Aioria.

  • Aioros… - Dice Aioria muy sorprendido - ¿Por qué incluso después de muerto sigues defendiendo a estos niños? – Sera que…
  • Aioria – Dice Seiya – No necesito esta armadura para derrotarte. – Seiya vuelve a vestir su armadura de bronce, y con un poder completamente desconocido por el logra golpear al santo de leo, lanzando contra un pilar.
  • Seiya… Lo siento… - Aioria habla mientras se levanta y observa cómo tanto el santo de dragón y Andrómeda habían llegado al templo. – Me he equivocado, pero primero debo enmendar mis errores. – Este se acerca al inmóvil cuerpo de Shaina – Me llevaré y te prometo que la ayudaré. Luego debo reunirme con mis compañeros en casa de Aries. Siento que eso es lo que mi hermano querría.
  • Gracias Aioria… - Dice Seiya
  • Seiya has despertado el séptimo sentido solo por un momento, de misma manera he sentido que tus amigos también. Pero el siguiente combate, no deben luchar solos, deben terminar con el antes que el lo haga con ustedes. El santo de Virgo es implacable y no los escuchará. Recuerden que todos los santos de oro pensamos, o más bien pensábamos; que Eris está realmente en el cuerpo de Athena… y eso es algo que debo responderme ahora mismo.
  • Seguiremos entonces – Dice Shiryu
  • No dejen que Shaka abra sus ojos… - Son las últimas palabras mientras este desaparecía en el acto con Shaina.

                En otro lado, dos hombres se encontraban meditando para un combate que explotaría muy pronto, mientras ambos sienten la presencia del otro, los santos de bronce continuaban su camino.



#63 Pojoyuelo

Pojoyuelo

    Miembro habitual

  • 50 mensajes
Pais:
Chile
Sexo:
Masculino
Signo:
Virgo
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 04 marzo 2020 - 10:26

11.- Shaka de Virgo

  • ¿Cuál es el sentido de la vida? – Pregunta un niño al vacío
  • Esa no es la correcta pregunta Shaka… La vida solo es un camino, y el tuyo estaba escrito, así como el mío para ser un protector.
  • ¿Por qué debemos protegerla? – Pregunta insistentemente el niño
  • Shaka. Las respuestas están en frente tuyo – Una luz dorada resplandece al fondo de la habitación oscura. – Todos estamos conectados, cuando llegue el tercero, entenderás las respuestas.

                Las horas seguían, y cada vez se hacía más tarde para poder sacar la flecha del pecho de Athena. Los santos de bronce continuaban su camino hacia la casa de virgo, con el pesar de haber perdido a Hyoga. Estos al ingresar al templo, observan como un joven se encontraba levitando en el centro del templo.

 

                El joven, que no portaba armadura se encontraba en silencio, rodeado de un aura dorada que brillaba por todo el oscuro templo. Los santos de bronce al no tener respuesta, avanzan y evitan al joven. Una vez llegado a otro punto, vuelven a vislumbrarlo nuevamente.

  • No puede ser – Dice Seiya – Estamos corriendo en círculos
  • ¿Disculpa? – Dice Shun al joven – Necesitamos pasar por este templo. ¿Sabes dónde está el santo de Virgo?
  • Ustedes no saldrán de aquí con vida – El joven habla cuando inmediatamente, los jóvenes de bronce se dan cuenta que no se encontraban en el templo, sino que en una mano gigante. Esto hace que los tres salgan despedidos por los aires sorprendidos.
  • ¡Eres el santo de Virgo! – Dice Shiryu – Ponte tu armadura y defiéndete.
  • No me defenderé de alguien que ya perdió. – Shaka levanta su dedo y atraviesa el pecho del santo de dragón, luego hace lo mismo con Seiya y Shun. Ambos caen al suelo derrotados.
  • Este combate se acabará pronto.
  • Detente… - Dice un herido Shun – No tengo permitido perder en este combate
  • Me sorprende que los tres se mantengan con vida, pero me sorprende más aún que tú puedas mantenerte de pie. – Shaka deja su posición de meditación, y mientras lo hace es cubierto por una armadura dorada.

                El santo de Virgo ataca a su oponente con un golpe de luz, el cual Shun apenas puede esquivar, pero es impactado por un segundo que lo toma por la espalda. Inmediatamente y tras estos golpes, el santo de Virgo encierra a Shun en una caja dorada, la cual explota al instante.

  • Aún siento que vives Andrómeda – Dice Shaka luego del ataque - ¿Qué es lo que te mantiene con vida? Siento esa curiosidad.
  • Athena… Shaka, se quién eres… Mi maestro me contó muchas historias del santo de Virgo, el más cercano a los dioses por su poder, y también por su falta de humanidad… Pero Shaka, no siento esto en ti. A ti te importa aunque trates de esconderlo
  • Estás delirando niño… los santos de virgo somos los más cercanos a un Dios… - Shaka levanta del cuello a Andrómeda - ¿Por qué mencionas a Athena?
  • Eres un santo de Athena… es nuestra misión…
  • Athena lleva luchando contra los dioses durante milenios, créeme que lo sé, y se como todos los combates han terminado. ¿Qué oportunidad crees que Eris tendría con Hades? Seguir con el patriarca es el sendero que los santos debemos tomar. Luego de tomar sus vidas, tomaré la de ella por el sacrilegio… - esta vez morirás Andrómeda…

                Antes de que el santo de Virgo pudiera dar el golpe final, este es detenido por un ataque que conecta directamente en el centro de su armadura. Shaka observa que tenía una pequeña hoja incrustada, esta hoja era de color amarilla, y brillaba con la luz de la propia armadura de Virgo.

 

                Shun, aún sorprendido por lo que había ocurrido, observa como un hombre un poco mayor que él había aparecido detrás del santo de Virgo y había evitado que este le diera el golpe final a todos los de bronce.

  • Fénix… - Dice Shaka – Tu presencia aquí… especialmente con esa armadura del inframundo… es un sacrilegio mucho mayor…
  • ¡Hermano! – Dice Shun al ver que el santo del fénix lo había salvado.
  • Shun, toma a Seiya y Shiryu, vayan al siguiente templo. Yo lucharé contra Virgo y los alcanzaré. No es momento de desobedecer, ahora parte.

                Shun sin cuestionar las órdenes de su hermano levanta a sus compañeros y continúa el camino, ante la completa indiferencia de Shaka e Ikki. Ambos hombres hacían arder su energía interior, al punto que se comienzan a crear llamas alrededor de Virgo.

  • Impresionante – Dice Shaka – Digno de un traidor a Athena… - El santo de virgo al levantar su brazo detiene las olas de llamas que se dirigían hacia el – Pero tendrás que hacer algo más si quieres atacarme.
  • ¿Si? – Dice Ikki sorprendido – No tengo ni idea de lo que dices, pero acabaré contigo.
  • Te presento el regalo del cielo – Shaka congela a Ikki – El regalo de los Dioses hacia un traidor de Hades y Athena, es tu juicio… - Shaka abre sus ojos ante el santo del Fénix… - Gusto… dejarás de hablar… Vista… quedarás ciego… Olfato… audición… Tacto… tu cuerpo ya está congelado. - En materia de segundos los cinco sentidos principales de Ikki habían desaparecido por acción del santo de Virgo. Este golpea al cuerpo inmóvil del santo y destruye por completo la armadura del Fénix. – Solo queda tu sexto sentido, en cuanto lo elimina, solo serás un cascarón vacío. Este es el regalo del cielo a los que desafiaron a Dios.

                Shaka se dispone a dar el golpe final, pero antes de que pudiera hacer algo, siente como una energía ardiente surge desde dentro de sí y una sombra de un fénix en llamas protege a Ikki del golpe final. Este y ante la sorpresa del santo de Virgo hace que la armadura del fénix se repare a sí misma, luego de una explosión gigante, ambos cosmos desaparecen del plano de la tierra, dejando un gran vacío en el templo.



#64 Patriarca 8

Patriarca 8

    Miembro de honor

  • 16,112 mensajes
Pais:
Peru
Sexo:
Masculino
Signo:
Cancer
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 04 marzo 2020 - 14:24

11.- Aioria de Leo

 

Shaina incluso en los fics esta obsesionada con Seiya XD

 

 

 

11.- Shaka de Virgo

 

shun tratando de que shaka recapacite me recuerda a los acontecimientos de ND

 

buen combate entre el fenix y shaka

 

 

 

PD: buen fic


fwoTpjp.pngd2846x5-c33eb060-952a-40e4-b79b-ac99f8b9

 

 

 


#65 Pojoyuelo

Pojoyuelo

    Miembro habitual

  • 50 mensajes
Pais:
Chile
Sexo:
Masculino
Signo:
Virgo
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 04 marzo 2020 - 14:40

Gracias por el feed! No siempre los 5 de bronce serán protagonistas, pero su camino será hacia las armaduras de oro en algún momento.

Desde la casa de Capricornio en adelante los desenlaces serán diferentes al manga y anime!

#66 Cannabis Saint

Cannabis Saint

    Miembro de honor

  • 2,687 mensajes
Pais:
Honduras
Sexo:
Masculino
Signo:
Sagitario
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 04 marzo 2020 - 22:21

Me gusto ese Shaka, y Shun muy bien, ahora me pregunto si incluiras la controversial escena en la casa de Libra, jaja muy buen fic,

#67 Pojoyuelo

Pojoyuelo

    Miembro habitual

  • 50 mensajes
Pais:
Chile
Sexo:
Masculino
Signo:
Virgo
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 05 marzo 2020 - 09:13

12.- Las armas de Libra

 

                Cada cientos de años, los sellos momentáneos que Athena coloca a Hades y sus espectros se rompen y comienza una nueva guerra santa. En donde las reencarnaciones de estos seres mitológicos deben enfrentarse de nuevo en un ciclo sin fin.

 

                Hace aproximadamente 230 años, en las ruinas de lo que había sido el patio de Athena, se encontraba una joven que vestía una armadura que cubría todo su cuerpo, a su lado se encontraban dos santos dorados bastante heridos y agotados.

  • Athena… los jueces del inframundo han caído, solamente está el. Tenemos que terminar esto ahora… - dice uno de los jóvenes guerreros a la mujer con armadura.
  • Calma Dohko – Responde con voz cálida la mujer – La lucha final ya está aquí.
  • ¡Athena! – Del cielo cae un joven que vestía una armadura de Pegaso, pero esta era muy diferente, cubría todo su cuerpo y brillaba con un aire divino. – Es Hades… Hades ha llegado al templo.
  • Lo sé… gracias por todo Pegaso… es hora de irnos. 
  • ¿Irnos donde Athena? – Dice el santo de Aries que los acompañaba.
  • Dohko… Shion… Su misión es distinta, y ambos saben cuales, ya que he encomendado a ustedes, mis dos caballeros de oro, que se preparen cuando Hades regrese… Dohko… ha llegado la hora…
  •  Si… Athena… - Dohko saca dos armas de su armadura, una espada que le entrega a Shion y una lanza que mantiene para sí mismo. Este le ofrece a Pegaso y Athena armas, pero estos señalan tener otro plan.

                De la nada, un agujero que trasciende el espacio y el tiempo se abre en el centro del templo. De este sale un hombre pálido con facciones perfectas, pero con una mirada vacía de maldad pura. Este estaba cubierto por una armadura gigante negra y una espada. El hombre sale del portal y se enfrenta a los cuatro guerreros. Detrás de él surge un puñado de soldados con armaduras del mismo material que la de Hades.

  • Athena… He asesinado a todos tus guerreros, solo quedan ustedes cuatro… Este es el momento final… La guerra santa acaba hoy… - Hades arremete contra la diosa, pero su espada es detenida por el brazo del santo de Pegaso, este se sorprende y Athena usa su distracción para abrir un portal nuevo.

                Mientras esto ocurría, los dos santos dorados luchaban contra el resto del ejército del dios del inframundo. Con ayuda de sus armas logran vencer rápidamente y sellarlos en un rosario que Shion portaba. Al mismo tiempo, Pegaso se sacrifica para lanzar a Hades al portal y ellos junto a Athena desaparecen del lugar.

 

                Luego de que la batalla terminara, un cansado Dohko y Shion se juntan en frente al cuerpo inerte de Hades. Su alma, así como la de Pegaso y Athena habían desaparecido del lugar dándole fin a la guerra santa.

 

                Ya casi 230 años después de esa guerra un nuevo Pegaso, en compañía de más santos de bronce se acercaba al templo de Libra. Ya había pasado la mitad del tiempo que tenían para llegar a la recamara del gran patriarca, y los tres santos de bronce restantes estaban ingresando al templo de Libra. Tanto Shiryu como Seiya; que habían despertado del ataque de parte del santo de Virgo, continuaban junto a Shun por las largas escaleras.

 

                El cansancio ya se hacía notar lo suficiente pasado las horas. Pero esto no impedía que los santos de bronce se sintieran esperanzados, a pesar de las pérdidas. En un momento una explosión de energía ocurre en el templo de Virgo, estos al saber lo que había ocurrido, prefieren no mirar atrás y entrar al templo.

 

                Una vez adentro, observan como en el centro se encontraba un sarcófago de hielo, pero lo que más le llamó la atención fue que dentro se encontraba Hyoga. Los santos verifican que el cisne se mantenga con vida e intentan librarlo por la fuerza pero el ataúd no cede.

 

                Justo en ese momento la armadura de libra aparece y se dirige en dirección a Shiryu. Esta lo cubre parcialmente y le entrega una espada. Shiryu, sabiendo lo que tenía, rápidamente golpea el sarcófago de hielo lo destruye. Hyoga cae al suelo inconsciente aún.

  • Las armas de libra, solo se utilizan en el momento que sea realmente necesario. Aparte del arco de Sagitario, o las extensiones como la cadena de Shun… las armas están prohibidas. Mi maestro Dohko nos ha ayudado desde la distancia.
  • Debemos ayudar a Hyoga, sigue congelado.
  • Seiya… Shiryu… tengo una idea… - Shun aleja a sus compañeros de batalla y concentra toda su energía hacia Hyoga por medio de sus manos, la energía es tal que logra despertar al santo de cisne. Esto a costa de la fuerza del santo de Andrómeda que cae inconsciente.
  • Muchachos… - dice Hyoga al despertar – Gracias…
  • Hyoga debemos continuar… ¿Quién te hizo esto?
  • Fue mi maestro Camus… El laberinto de Géminis me dejó en este lugar, cuando me di cuenta, el santo de oro de Acuario, Camus, mi maestro me encerró en este ataúd…
  • La casa de Acuario aún está muy lejos – Dice a Seiya ayudando a Shun a levantarse
  • La siguiente casa es la de escorpio, necesitaré respuestas ahí – Contesta Hyoga al colocarse de pie – No perdamos el tiempo, debemos continuar… Shun…
  • Estaré bien Hyoga – contesta el santo de Andrómeda

                En la siguiente casa, el santo de escorpio, Milo, se encontraba observando a la distancia lo ocurrido, este se retira al interior de su templo, en el que se encuentra Camus de Acuario acomplejado por lo ocurrido.

  • Tu plan falló Camus – Le dice Escorpio a Acuario
  • Lo sé Milo. tan solo esperaba que fuera todo más fácil, pero creo que lo he complicado…
  • Lo siento Camus, eres mi amigo… pero los tendré que matar… a todos…
  • Harás lo que tengas que hacer viejo amigo… - Contesta el santo de acuario retirándose hacia su propio templo.


#68 Pojoyuelo

Pojoyuelo

    Miembro habitual

  • 50 mensajes
Pais:
Chile
Sexo:
Masculino
Signo:
Virgo
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 06 marzo 2020 - 08:31

13.- Milo de Escorpio

 

                Las horas pasaban y el fuego que correspondía a la casa de Libra se estaba extinguiendo, y así cada vez estaba más cerca la posibilidad de perder a Athena. Los santos de bronce que habían recuperado a Hyoga, pero habían perdido rastro del hermano de Shun en la casa de Virgo.

 

                Pese a esto, las noticias no los desmotivaban, ya que sabían que al menos uno de ellos debía llegar con vida a los aposentos del patriarca. Una vez dentro del templo de escorpio, el santo que protegía esta casa, los estaba esperando.

  • Debo admitir que estoy muy sorprendido que llegaran a este templo. – Dice Milo con un tono sarcástico.- Pero está bien, por lo visto uno lucha y el resto avanza. Veo que solo así han logrado avanzar.
  • Si hemos llegado hasta acá, seguiremos avanzando – Contesta Seiya
  • Eso no es de mi interés. Vamos ataquen… -
  • ¡Ahora! - interrumpe Hyoga 

                En el momento que el santo del cisne da la orden, este ataca a su oponente con una onda fría, lo que permite que sus piernas se congelen y Shiryu, Seiya y Shun avancen delante de Milo. Esto deja que tanto escorpio como Hyoga queden en el solitario templo.

  • Eres muy valiente, Hyoga. ¿Planeaste esta movida en el camino hacia mi templo?
  • Necesitaba estar solo… - Hyoga se coloca en posición de combate – Sé que mi maestro Camus estuvo aquí, y sé que mantienes una gran amistad con él.
  • ¿Gran amistad? – Contesta con tono sarcástico a su oponente - Camus y yo fuimos entrenados por Krest el anterior santo de Acuario, alguien que murió antes si quiera que nacieras. Se lo que Camus te hizo en la casa de Libra, y también sé cuáles son sus motivos.
  • ¡Habla! – Amenaza Hyoga
  • Creo que se te olvido que hablas con un superior, y peor aún, se te olvido que este combate se debe al sacrilegio de los santos de bronce de alabar a una impostora. Pero está bien, con el permiso de Camus, te acabaré. Dudo que tus amigos pasen las casas que quedan, luego de eso yo mismo haré el trabajo con esa niña.

                La tensa conversación es interrumpida con un choque de ambos golpes en el vacío del templo. Hyoga intenta golpear a su oponente, pero este solo logra esquivar cada movimiento que se le arremete.

                Aprovechando la desesperación que el santo del cisne estaba sintiendo en el momento, Milo, ataca con un solo dedo a su oponente. El golpe es tal que congela la ofensiva por completo de Hyoga

  • Has sido golpeado por mi aguja escarlata, este es solo el primero de tantos que recibirás. – Le informa el santo de escorpio a Hyoga – Escucha, respeto a tu maestro, más de lo que respeté al mío… Y si Camus decidió que tu destino era estar encerrado en ese ataúd para siempre, y así evitar que alguien te asesinara, debiste aceptarlo con gusto. – Milo deja de sonreír al ver al sangrante caballero del cisne. – Tu maestro te estima mucho, niño.
  • Pero está ciego… el me envió a matar a Athena, pero él no sabe la verdad, la persona que se encuentra en este momento con Mu de Aries es Athena, deben sentirlo, no se dejen llevar por las palabras del patriarca
  • ¡Silencio! – Milo ataca con su aguja una serie de veces continuas, lo que provoca que Hyoga caiga sangrando en el suelo – Estamos hablando de Camus, solo por eso podría perdonarte la vida, pero usar el nombre de Athena en vano… mereces la muerte Hyoga

                Pero antes de que pudiera continuar su ataque, este observa que Hyoga había atacado con pequeños anillos de hielo su cuerpo. Esto no tiene mucho efecto, pero logra sorprender y darle más tiempo de vida al santo de cisne.

 

                Milo, y pese a la respuesta de su oponente, continúa atacando cada punto vital en el cuerpo del cisne, hasta que lo deja inconsciente en el suelo, prácticamente moribundo. Milo al ver esto se acerca al cuerpo del joven.

  • Camus… se lo mucho que querías evitar esto… pero si Hyoga llegara a otro templo, lo asesinarían sin compasión. – Milo le da la espalda a su oponente y se retira.
  • Milo… aún no he terminado… - Hyoga se arrastra por el suelo – Debo llegar donde mis amigos…
  • Nunca había visto a alguien con semejante temple en su misión… deberías estar muerto… - contesta sorprendido el santo de escorpio – No sufrirás más en esta vida Hyoga.

                Cuando Milo se disponía a dar su golpe final, observa como su armadura estaba teñida de cristales. Estos resplandecían con el brillo dorado propio de su armadura. En ese momento Milo se da cuenta que si no hubiera estado protegido por este material, hubiera perdido el combate antes de que hubiera logrado asestar el golpe final.

 

                El santo sorprendido, se acerca al cuerpo de Hyoga, este con un último golpe logra frenar el sangrado y hace que Hyoga recupere el conocimiento.  Este lo ayuda a colocarse de pie, y lo ayuda hasta la salida del templo de escorpio.

  • Hyoga… durante un breve segundo, despertaste tu séptimo sentido – Ese es el motivo de porque tu maestro no quería que lucharas, pero en nuestro combate has avanzado. Gradualmente te sentirás mejor, ya que he parado la hemorragia
  • ¿Por qué haces esto? – Le pregunta Hyoga que ya se podía colocar de pie por si mismo
  • La determinación que mostraste en nuestro combate, es la determinación que un santo tiene por luchar en lo que verdad es correcto. – Milo hace una pausa – Escucha Hyoga, todos sentimos la presencia de Athena, pero cada uno debe descubrir por sí mismo si lo que dices es verdad. – Milo apunto hacia los aposentos del patriarca – Sigue a tus compañeros y descubran su destino… si efectivamente es Athena quien se encuentra herida en el templo de Mu, te aseguraré que yo mismo será el que tome la cabeza del patriarca. Vamos… tus amigos te esperan en el templo de Aioros…


#69 Patriarca 8

Patriarca 8

    Miembro de honor

  • 16,112 mensajes
Pais:
Peru
Sexo:
Masculino
Signo:
Cancer
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 06 marzo 2020 - 14:14

12.- Las armas de Libra

 

Buena batalla contra Hades

 

menos mal que esta version de shun tiene sentido común

 

 

 

13.- Milo de Escorpio

 

Así que el dorado de escorpio y acuario tuvieron el mismo maestro

 

Milo como de costumbre poniendo a prueba la lealtad de los caballeros de Athena


fwoTpjp.pngd2846x5-c33eb060-952a-40e4-b79b-ac99f8b9

 

 

 


#70 Pojoyuelo

Pojoyuelo

    Miembro habitual

  • 50 mensajes
Pais:
Chile
Sexo:
Masculino
Signo:
Virgo
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 16 marzo 2020 - 12:04

14.- Aioros de Sagitario

 

                Hace unas horas, en el templo de virgo, dos fuerzas se estaban preparando para explotar frente a la otra. Dos fuerzas de distintas procedencias, pero con una misma fuente. Tanto el santo de Virgo como el de Fénix, estaban sorprendidos por el poder del otro.

  • Fénix ha despertado el séptimo sentido… - Dice Shaka impactado – Esto no tiene sentido, los espectros no merecen manchar este santuario. Athena fue muy buena contigo en la antigüedad, pero esto acaba ahora.
  • Descubrí tu secreto… mantienes cerrados tus ojos para acumular la energía en tus otros sentidos, y luego al abrirlos, explota tu energía. Pero esa es tu debilidad, una vez que has explotado… solo quedas tú. – Ikki agarra por la espalda a Shaka e implosiona
  • Este cosmos… no eres solo tu Ikki… es… Athena… no puede ser… ¡Ikki detente! – Grita Shaka, pero había sido muy tarde, ya que ambos habían desaparecido por completo. Bajo un gran estremecimiento.

                Mientras el tiempo avanzaba, los sacrificios de los santos de bronce se hacían notar. Seiya, acompañado de un débil Shun y Shiryu llegan a la entrada de la casa del santo dorado Aioros de sagitario. Un templo, que ellos pensaban se encontraba vacío al igual que el del maestro del dragón, Dohko de Libra.

 

                Pese a esto, los santos de bronce se encontraron con la sorpresa que el templo estaba siendo protegido por soldados del santuario. Rápidamente y sin mucho esfuerzo logran despachar a los guardias para finalmente hacer ingreso a la entrada del templo del santo de Sagitario.

  • Los estaba esperando – Dice una voz femenina en las escaleras – Seiya… tú y tus amigos necesitan descansar.

                Al momento de observar la entrada del templo, los santos de bronce ven la figura de una mujer, vestida de una armadura de plata. Esta era completamente  desconocida para todos, menos para Pegaso que identificó a la santa, como su maestra, Marín de Águila.

  • La casa de sagitario ha estado vacía por casi 18 años, la única diferencia es que cuando su anterior protector murió, la armadura nunca regresó a su lugar, no hasta hace segundos – Marín guarda silencio y ve como un destello dorado cae del cielo hacia el centro del templo. En el centro se encontraba la armadura de sagitario en su estado natural. – Seiya… tú y tus amigos necesitan descansar.
  • No podemos Marín… Athena nos necesita, y no podrás detenernos, debemos seguir, nuestras armaduras aún se encuentran en perfecto…
  • Sus armaduras sí, pero sus cuerpos están descuidados. – Marín llama a los tres santos al centro del templo. – Su amigo Hyoga está ingresando al templo también lo esperaremos…

                Luego de que Hyoga ingresara al templo y sus amigos le explicaran lo sucedido, la santa de Águila hace aparecer 4 plumas. Cada una de ellas estaba cargada con energía pura. Cuando estos tomaron cada una, los guerreros sienten como sus energías se comienzan a restaurar.

  • Deben esperar al menos media hora para que la pluma haga su efecto completo – Dice Marín ante el silencio de los santos de bronce. – Les quedan tres casas, más la del patriarca. Creo que todos saben que es lo que deben hacer.
  • Marín… - Dice Shiryu - ¿Por qué nos ayudas?

-          Hace años, antes que incluso ustedes nacieran, fui entrenada por Aioros el santo de Sagitario, lamentablemente para el día de su muerte yo era muy pequeña, por lo que el mismo patriarca junto al hermano menor de Aioros, Aioria completo mi camino. – Marín toma una pausa – Pero antes de que todo ocurriera, antes que incluso Athena naciera, el patriarca hizo un llamado particular con Aioros. Le encargó el entrenamiento de un nuevo santo a este. Ese serías tu Seiya. Debido a su muerte, tuve que encargarme de tu crecimiento.

 

                En ese momento en el cual Marín hablaba, la armadura de Sagitario comienza a moverse por sí misma, esta comienza a apuntar a la pared y lanza una flecha dorada, lo que termina por destruir la pared. En el espacio había un mensaje escrito.

 

–        Santos de Athena – Dice Shiryu – Les encargo el futuro a ustedes

–        El alma de Aioros… - Dice Seiya con la voz entrecortada – Es por eso que jamás regresó al templo, es por eso que me protegió contra Aioria… Aioros estuvo dentro de esta todo el tiempo hasta poder darnos su último mensaje…

–        Es hora ya santos de Athena… Su energía se ha repuesto. Recuerden que al menos uno debe llegar al patriarca, si logran dividirse podrán llegar más rápido a su meta

–        Marín – Dice Shun – ¿Te devolverás al templo de Mu con los demás caballeros dorados?

–        No, aún hay un trabajo y una respuesta que debo tener, mientras ustedes continúan su camino, descubriré el real motivo de lo que está sucediendo. Me niego a aceptar la idea de que el patriarca no sabe que esta es Athena. Ahora caballeros de bronce, la casa de capricornio es la siguiente.

 

                Mientras los santos de bronce se dirigían hacia el siguiente templo, el de capricornio, en el templo de Aries acababa de llegar el santo de Leo. Este se acerca y observa como Mu y Aldebarán rodeaban el frío cuerpo de la joven. El joven santo se dirige hacia ella, y al igual que sus compañeros se sienta de rodillas alrededor de ella.

 

                Cuando este se sentaba, logró sentir dos cosmos distintos. Uno era muy cálido y divino, esto disipó por completo las dudas del santo ante la posibilidad de que sea Eris, pero el segundo cosmos fue el que más atención llamaba al santo de Leo.

 

-          También lo siento Aioria… - Dice Aldebarán a su lado – Tu hermano fue un orgullo para la armadura de Sagitario, tal y como lo serás para la armadura del viejo Illias. Hemos fracasado hoy, y cuatro santos de bronce nos han demostrado que el poder, no es la verdad absoluta.

-          Finalmente el cosmos de Aioros ha tenido paz. – Dice Mu – Puedo sentir como se aleja desde la casa de Sagitario, puedo sentir sus deseos.

-          Lucharemos por Athena hasta la muerte hermano… - Contesta Aioria mirando la constelación de sagitario, la que se veía más brillante desde ese punto.



#71 Pojoyuelo

Pojoyuelo

    Miembro habitual

  • 50 mensajes
Pais:
Chile
Sexo:
Masculino
Signo:
Virgo
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 20 marzo 2020 - 09:52

15.- Shura de Capricornio

                En las puertas de la entrada al templo de Capricornio, los santos pueden observar que se encontraba completamente deshabitada. Estos sin dudarlo se abren paso por sus largos pasadizos mientras que los minutos consumían las llamas del gran reloj del santuario, estos finalmente llegan al salón principal.

 

                El salón principal del templo se encontraba al lado de un patio, los santos de bronce habían conseguido pasar por la sala sin enfrentarse a su oponente y lo consideraban una victoria. Pero su felicidad llega sorpresivamente a su fin cuando observan que en estos patios se encontraba una estatua gigante. En ella se encontraban dos personas. Una mujer que claramente era Athena, pero a su lado un hombre armado por una espada.

  • En la era del mito… - Dice una voz detrás de los santos – Cuando se le fue entregado la labor de proteger a la tierra a Athena, esta decidió armar un ejército que la ayudara contra la inminente amenaza de invasión de Hades. Su primer fiel guerrero, fue un simple mortal. La diosa premio su poder con la espada Excalibur y junto a su constelación nació el primer santo dorado…
  • ¿Quién está ahí? – Pregunta Hyoga al observar a una persona cubierta de una armadura dorada apareciendo por detrás.
  • Mi nombre es Shura, soy el santo de Capricornio. – Contesta el hombre – He dejado que pasen por mi templo porque no deseo la destrucción de este monumento mítico. Pero ahora… ya es momento de terminar con todo.
  • ¡Ahora! – Grita Shiryu mientras se lanza contra el santo dorado –
  • Increíble que con esta fuerza llegaran a este templo… ¿Qué? – Contesta el santo estupefacto al ver que solo Shiryu permanecía ante él – Veo que tu plan era sacrificarte por ellos. Esta bien dragón, probaré tu fuerza, de todas formas dudo que tus amigos pasen la casa de acuario. – Shura da una pausa y se acerca a su oponente – Quiero que me demuestres el verdadero motivo de porque tu maestro, el santo dorado más fuerte no está aquí para defender a su falsa diosa.
  • Enfréntate a mí y lo verás – Contesta Shiryu.

                El santo de capricornio se abalanza directamente con su brazo ante el santo de dragón que se protege con su escudo. Este se confía al haber detenido su ataque, pero observa que el escudo de la armadura se había trisado y posteriormente destruido en dos ante la sorpresa del dragón.

 

                Shura vuelve a atacar a su oponente, pero esta vez Shiryu en vez de defenderse, contra ataca con sus puños, los cuales terminan destrozados al chocar con el brazo del santo dorado. El santo del dragón al darse cuenta de esto observa que el brazo del santo de capricornio brillaba con mucha intensidad.

  • Excalibur… mi maestro me conto sobre la leyenda del arma natural del santo de Capricornio
  • Tu maestro es sabio Shiryu… - Shura amenaza nuevamente con su brazo – Excalibur vive en mi brazo, y solo este golpe será el único que necesitare para derrotarte.
  • Esa arma fue entregada a los santos de Capricornio por Athena… ¿Porqué levantas tus armas contra ella? Supuestamente Capricornio siempre ha sido fiel ante la diosa.
  • ¡No soy fiel a Eris! ¡Ni a Aioros! - Shiryu intenta contra atacar, pero su fuerza no es comparable con la del santo dorado que lastima gravemente las piernas de su oponente. El golpe es tan contundente que lanza lejos al dragón – Aioros traicionó y entregó a Athena a la Diosa Eris. Yo… Aioros era mi mejor amigo, aunque fuera un poco mayor que yo, siempre soñamos en proteger a Athena el día de su nacimiento, y cuando tuvimos la oportunidad Eris no solo asesinó a los tres santos de oro más importantes, convenció al traidor para que la ayudara…
  • Si Aioros era tu amigo – dice dragón muy herido – Sabrías que estás equivocado. Pero mi trabajo no es convencerte. Es derrotarte – Shiryu conecta un golpe en la cara de Shura que lo lanza el suelo
  • Te subestimé dragón, y no debí haberlo hecho, especialmente porque eres el alumno de Dohko. – Shura levanta su brazo nuevamente – Pero esta vez se acaba todo. Adiós Shiryu.

                Shura lanza un ataque cortante hacia el santo de Dragón pero al momento de lanzar el ataque, el santo dorado se da cuenta que no estaba su oponente, y a que todo lo contrario, este lo había tomado por la espalda. Shura viéndose en una posición comprometedora intenta zafarse desesperadamente.

  • Mi maestro me prohibió esta técnica, pero debemos llegar al patriarca – Dice Shiryu
  • Esta energía… Athena… ¡Detente Shiryu! – Grita sorprendido Shura

                Un cometa parte hacia el cielo con ambos cuerpo. Shiryu se había aferrado al cuerpo del santo dorado, pero este al darse cuenta que su energía provenía de alguien más, de un cosmos divino toma una decisión importante, y con ayuda de su armadura cubre en parte del santo de Dragón antes que colapsen en el suelo.

 

                En el suelo del templo parecía como si un meteorito hubiera impactado contra la tierra, cuando el polvo se dispersó, se podían divisar dos cuerpos. El santo de dragón yacía casi muerto  en el suelo, con su armadura gravemente lastimada. Por su parte el santo dorado de capricornio se levanta con mucha dificultad, pero aún vivo.

  • Shiryu… - Dice Shura – Te he protegido con parte de mi armadura, pero no sé si serás capaz de despertar de tu propia técnica. Te he salvado la vida, y es momento de hacer lo correcto. Espero puedas colocarte de pie y acompañes a tus guerreros… Hay algo que debo hacer primero.

                El santo de oro con muchísima dificultad comienza a caminar y atraviesa su templo. Este de a poco y con muchos problemas para observar llega al templo contiguo que era el de sagitario. La sangre perdida en el combate contra el santo de dragón había causado también estragos graves, pese a eso, no detuvo la marcha hasta el templo.

  • Aioros… Amigo… con mi vida… cumpliré tu… última misión… - Piensa Shura para sí mismo mientras a la distancia siente el cosmos de Athena – Haré que te sientas orgulloso amigo mío, porque mi vida, al igual como la tuya, es de Athena. – Shura se levanta y con dificultad se vuelve a recostar al lado de la armadura de sagitario en donde lentamente queda inconsciente por los daños de la batalla.

 



#72 Cannabis Saint

Cannabis Saint

    Miembro de honor

  • 2,687 mensajes
Pais:
Honduras
Sexo:
Masculino
Signo:
Sagitario
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 22 marzo 2020 - 16:08

Me quedo con ganas de más Shura, a ver cómo cambia la historia desde ahora, saludos

#73 Pojoyuelo

Pojoyuelo

    Miembro habitual

  • 50 mensajes
Pais:
Chile
Sexo:
Masculino
Signo:
Virgo
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 23 marzo 2020 - 08:47

16.- Camus de Acuario

 

                Luego de la muerte de Athena a manos de Eris, el patriarca ordenó reagrupar nuevos santos para la protección de una posible invasión de Hades. Esto incluía como prioridad principal buscar nuevos dueños para las armaduras de los tres santos que habían caído en el combate.  

  • Aioria de Leo… Alumno de Illias de Leo… Mu de Aries… Hermano de Avenir de Aries… Camus de Acuario, anterior santo de Cristal, discípulo de Krest de Acuario… - Dice el patriarca – Ustedes tres han sido seleccionados por su trabajo, por sus maestros, pero principalmente por estas armaduras. Su misión no solo es proteger el santuario. Deben crear nuevos Santos… Camus, serás enviado a Siberia. Ahí encontrarás dos hermanos que acaban de perder a su madre. Tu deber debe ser entrenarlos para que les entregues la armadura de cristal y la de cisne que llena milenios durmiendo ahí.
  • Si gran patriarca… - Contesta obedientemente Camus…

                En otro tiempo y lugar, los santos de bronce continúan su camino hacia el penúltimo templo de las 12 casas, el de Acuario. Los tres santos restantes continúan su camino hasta que finalmente se encuentran en la entrada del templo.

  • Saludos caballeros de Eris… - Dice un joven cubierto por una armadura dorada – Soy Camus de Acuario… una de las últimas líneas de defensa del templo.
  • Déjanos pasar Camus – Dice Seiya
  • Eso pretendo hacer – contesta ante la sorpresa de los santos – Andrómeda y Pegaso pueden continuar su camino a la casa de Piscis, estoy seguro que Aphrodite puede con ambos. – Seiya se interpone ante la propuesta del santo dorado.
  • Esta bien Seiya, necesito hacer esto, solo nos queda una casa, y solo uno de nosotros al menos debe llegar. Déjame combatir esta batalla ante mi maestro – Los santos de bronce aceptan no muy convencidos y parten hacia el último templo de Piscis – Bien – Le dice Hyoga a su maestro – Antes que esto comience y termine… dime… ¿Porqué me encerraste?
  • Hyoga, te conozco desde que eras un niño. Tenía un poco menos de tu edad cuando me convertí en un santo de plata, cuando vi a mi maestro dar su vida por Athena… Los santos están destinados para morir Hyoga, pero no puedes morir aún. Cuando el santo de Géminis te envió a la casa de libra fue por mi propia decisión. Debía comprobar si tenías el poder necesario para continuar. Pero no lo tenías…
  • Derroté a Milo, puedo contigo maestro – Contesta el cisne – Debo proteger a Athena tal y como tu maestro lo hizo una vez
  • ¡Idiota! – Camus lanza una ventisca que inmoviliza a Hyoga – Mi maestro Krest dio su vida por Athena, para qu8e el santo de Sagitario nos traicionara y entregara el cuerpo de nuestra diosa a una farsante. – Camus se calma nuevamente – Te envié al pueblo con una misión. Fuiste el primer santo designado para vengar a Athena… y nos traicionaste.
  • Sabes que eso no es verdad – Contesta Hyoga – Siento tus dudas y siento que no están siendo sincero – Hyoga se libra del ataque de su maestro y lanza un aura congelado hacia Camus que lo detiene con su puño – Se que sientes que en la casa de libra hay tres santos dorados cuidando a Athena… se que en el fondo de tu corazón sabes la verdad. Pero aún así tu motivo es otro…

                Camus no contesta ante el ataque verbal de su maestro y arremete contra el. Hyoga que no se esperaba esto cae al suelo sangrante. El santo de Acuario vuelve a tomarlo por el cuello y lo arroja como una bolsa de basura en el piso.

 

                Hyoga intenta defenderse con anillos congelantes pero estos no dañan la armadura del santo dorado. Por su parte Camus utiliza la misma técnica contra su pupilo, pero con la diferencia que este congela ambas piernas del santo.

  • Solo alcanzando el cero absoluto serás digno de ser mi sucesor Hyoga – Le grita el santo a su pupilo – Pero con este poder, tu séptimo sentido sigue dormido, solo despertó en tu combate con Milo. Pero hay algo que te detiene
  • No puedo lastimar a mi maestro… No podemos perder a nadie más, no después de Issac…
  • ¡Deja tus miedos atrás! – Le grita Camus dándole un golpe que lo deja al borde de la muerte – Solo así podrás derrotarme.
  • Camus, maestro. Athena… necesitamos que Athena…
  • No me interesa Athena, Hyoga – El santo dorado levanta sus brazos – Si ustedes, o más importante, mis compañeros dorados lo creen… ella en este momento se encuentra a salvo. – Camus carga su ataque – Hyoga si sobrevives a esto serás un digno sucesor, tal como lo fue tu hermano hace años…
  • No me dejas otra opción maestro – Hyoga levanta sus brazos en la misma posición que su maestro – Creo que ahora entiendo tus reales motivos. ¿Qué amenaza te despierta este miedo aún mayor que lo que ocurre acá?
  • Lo sabrás a su tiempo – Camus se dispone a disparar – Debes sobrevivir, debes alcanzar el cero absoluto también… debes derrotarme.

                Ambos santos se atacan con la misma técnica. La colisión de ambas fuerzas genera una explosión que se escucha por todo el santuario, haciendo eco incluso en la casa de Aries done los santos dorados descubren lo que estaba pasando.

 

                Luego de la explosión, se puede observar que el templo había sido cubierto por hielo. Todo estaba congelado, especialmente dos puntos. Ambos santos de Athena se encontraban en la misma posición. Finalmente el santo de bronce cae inconsciente al hielo.

  • Hyoga… lo siento – Dice Camus con una voz muy débil mientras cae de rodillas al suelo – Por favor Cisne… Hyoga… hay mucho que debes aprender, y hay mucho que debo enseñarte de este mundo. – Camus cae al suelo al igual que su discípulo – Hyoga… no mueras… no podemos morir aún… Athena deseo conocerte… Krest…

                El santo de oro de acuario cae al suelo rendido y queda inconsciente. Ambos guerreros del frío se encuentran en condición crítica, aunque la batalla había terminado, un combate entre maestro y discípulo había hecho crecer  a ambos.

 



#74 Cannabis Saint

Cannabis Saint

    Miembro de honor

  • 2,687 mensajes
Pais:
Honduras
Sexo:
Masculino
Signo:
Sagitario
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 23 marzo 2020 - 20:05

Otro cambio muy interesante, más coherente que el MO, jaja a ver cómo utilizas al cisne y su maestro más adelante! Saludos

#75 Pojoyuelo

Pojoyuelo

    Miembro habitual

  • 50 mensajes
Pais:
Chile
Sexo:
Masculino
Signo:
Virgo
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 24 marzo 2020 - 10:45

17.- Aphrodite de Piscis

 

 

                En una isla muy lejos del santuario. La isla de Andrómeda, un joven de 18 años había recibido una armadura. Esta armadura desde la era del mito se encontraba encerrada en las profundidades de un acantilado. Su maestro Albior de Cefeo, uno de los caballeros de plata más fuerte se encontraba junto a él.

  • Shun… lo que has logrado hoy es muy importante – Le dice su maestro con voz cálida – Pese a eso no siento que estés del todo feliz.
  • Mi misión en esta isla ha terminado, y he conseguido la armadura de Andrómeda, sé que eso debería colocarme feliz. – Shun se detiene a pensar durante un momento. – Maestro, hay algo… algo que ocurrió cuando estaba en la prueba. Cuando estaba atado, una luz acudió a mí. – Albior escucha con atención.
  • ¿Sentiste el cosmos de Athena? – Le pregunta serenamente Albior ante un sorprendido Shun.
  • Si pero no puede ser… el santuario ha dicho que Athena fue asesinada por Eris años atrás.
  • Eso es lo que el patriarca y muchos santos repiten constantemente – Albior hace una pausa – Shun, debes seguir esa luz, encontrar tu camino… y si efectivamente te topas con Athena, tu misión siempre será cuidar de ella, incluso con tu vida.
  • Pero eso me hará un traidor maestro…
  • Los santos le debemos nuestra lealtad a Athena, no al santuario, Shun – Es interrumpido por una voz detrás de los santos.
  • Tenía mis dudas que la misión que me habían encomendado fuera necesaria. Pero parece que he llegado en el momento adecuado. – El hombre se acerca y muestra una armadura dorada – Mi nombre es Aphrodite de Piscis. He sido enviado por el patriarca para cazar al santo de plata traidor.
  • ¿Traición? – Albior se coloca en frente del santo dorado – Aphrodite, recuerda que ambos fuimos entrenados por el mismo hombre. Conozco tus intenciones y jamás aceptarías una tarea así… a no ser…
  • Athena ha fracasado incontables veces. Sé que el patriarca nos llevará a la victoria. Mi lealtad es completamente hacia él. Ahora… Andrómeda… La localización que recibiste en pocos minutos será atacada por un ejército. Espero que no continúes con esa idea de escapa… - Aphrodite es golpeado por una cadena del santo de plata.
  • ¡Shun! ¡Escapa con June! – Albior vuelve a contra atacar al santo dorado y lo lanza al mar con su fuerza
  • Pero maestro… lucharemos juntos – Albior ataca a Shun y lo lanza lejos
  • Shun… - Piensa para sí mismo el santo de plata – Se el poder que llevas dentro, pero sé que aún no lo descubres. Espero haberte enseñado todo lo que necesites… Adiós amigo…

                Luego de esto, el santo de Andrómeda solo recuerda imágenes, escapa con ayuda de su compañera santo de bronce June. El combate continúa por unos minutos la cual desencadena una gran explosión en la isla con el cosmos de su maestro desapareciendo por completo, quedando solo el del santo Dorado.

 

                Ya pasado los años, en la entrada del templo de Piscis, el santo de Andrómeda le pide a su compañero Pegaso que continúe sin él. Este sabía que en ese templo se encontraba el asesino de su maestro.

  • Andrómeda – Le dice la voz del santo de Piscis – Esperaba verte de nuevo para terminar lo que empezó en la isla de Andrómeda… Pegaso continúa tu camino… - Seiya avanza no muy convencido sobre el dejar a su compañero solo. – Tu maestro, el santo de plata Albior esta muerto Shun… - Dice Aphrodite con voz burlesca – El sabía que no debía desafiar al patriarca, Shun… por lo visto las malas costumbres se aprenden…
  • Mi maestro fue la única persona que me ayudo a entender la pérdida de mi hermano cuando era niño… El sabía la capacidad completa de mi fuerza, y es por eso que me dio esa oportunidad de escapar. – Shun lanza sus cadenas y encarcela al santo de Piscis – No deseo pelear ni mucho menos lastimarte, incluso si mataste a mi maestro. Pero mi misión es por Athena y no dudaré en lastimarte para avanzar.
  • ¿Athena? – Dice Aphrodite con tono burlesco de nuevo – Esa niña quizás lo sea… pero ya lo dije una vez – Aphrodite se libera de las cadenas – Mi lealtad es por la justicia del patriarca… ¡El dios de la Guerra!

                El santo dorado lanza una rosa que impacta directamente en el brazo del santo, esto hace que una de las cadenas se desprenda de la armadura y la trise con facilidad. Shun sorprendido intenta contraatacar con la otra cadena, pero otra rosa provoca el mismo efecto.

 

                Shun sorprendido intenta abalanzarse contra su oponente, pero este contesta con una tercera rosa que lo inmoviliza por completo. Al ver esto el santo de Piscis se confía ya que cree haber derrotado a su oponente de una manera rápida.

  • Creo que Albior te tenía demasiada fe Andrómeda – Le dice el santo de Piscis retirándose – Sin tus cadenas eres completamente inútil… Es momento de darte el golpe final, el mismo que le día a tu maestro… ¿Qué es esto? – Aphrodite se detiene intrigado por una emanación de energía. – No es solo Shun… ¿Athena? – Piscis vuelve a sonreír – Es el momento para que la diosa entienda que no los necesitamos para ganar una guerra. ¡Esta es la última rosa!
  • Lo siento Aphrodite… - Shun se levanta y se llena de un aura que se observa como una pequeña corriente – Mientras estabas distraído con mis cadenas… - Shun se encuentra muy débil y le cuesta hablar – Has sido rodeado por una corriente nebular – Aphrodite se observa completamente rodeado… si lanzas la rosa la corriente se defenderá por si misma y te va a asesinar… es tu última oportunidad…
  • ¡Adiós Athena! – Grita Aphrodite mientras lanza su última rosa al mismo momento que Shun hace crecer la tormenta.

                La explosión provocada por la corriente destruye el interior del templo de Piscis. Seiya que había conseguido avanzar por las escaleras se da cuenta que el único cosmos que continúa en el combate es el del y a pesar de sentirse preocupado continúa por el camino de rosas que llevaba al santuario.

 

                Nuevamente en el templo de Piscis, esta vez se pueden observar a dos hombres. Aphrodite yacía muerto en el centro con una rosa en su mano y lágrimas en sus ojos. Por su lado Shun se encontraba consciente pero gravemente herido. Este tenía una rosa que estaba completamente teñida de rojo en su pecho.

 



#76 Pojoyuelo

Pojoyuelo

    Miembro habitual

  • 50 mensajes
Pais:
Chile
Sexo:
Masculino
Signo:
Virgo
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 26 marzo 2020 - 15:41

18.- El engaño.-

                En el otro extremo del santuario, se encontraba una colina. Esta colina era conocida por ser el camino principal hacia parajes como los campos elíseos o incluso el mismo Olimpo. Pese a esto solo un dios podía acceder a estos lugares. De misma manera esta colina era utilizada exclusivamente por el patriarca para observar el futuro mediante las estrellas.

 

                Durante milenios esta tierra solo había sido vista por Athena, el patriarca y un pequeño puñado de los caballeros de oro más fuertes de la historia. Esta vez una mujer con armadura de plata se acercaba a la cima en busca de respuestas sobre todos los eventos desafortunados que ocurrían.

 

                Marín era una santo de plata. Era la maestra del santo de Pegaso y compañera del santo de Leo. Ambos fueron entrenados tanto por el santo dorado Illias como el hermano mayor de Leo; y ahora traidor; Aioros de Sagitario, una carga que les costó muchos malos ratos en su entrenamiento.

 

                La noticia había sido devastadora para un joven Aioria que inmediatamente asumió la traición de su hermano. Pero para Marín era distinto. Esta que no compartía lazos sanguíneos, sabía que algo estaba mal. Pero debido a que ambos no eran nada más que aprendices sin rango y muy pequeños, no podían comprobar nada.

                Los años pasaron y Marín entrenó a su aprendiz de la misma manera que su maestro lo había hecho con ella. Es hasta ese día de la prueba de Seiya donde Marín decide que es necesario saber la verdad, especialmente porque había una gran posibilidad de que Athena siguiera viva y limpiar el nombre de Aioros.

 

                Pese a esto, las esperanzas en poder buscar redención habían desaparecido hace años. Todo esto hasta un buen día donde su propio alumno, vestido de la armadura dorada de sagitario se enfrentó a su anterior compañero de entrenamiento. Ya era momento de saber la verdad, y Marín sabía lo que había pasado.

 

                La entrada a ese santuario se veía simple. Era un espacio casi vacío, solo estaba rodeado de algunas esculturas de Athena contra Hades. Estas parecían muy antiguas y por algún motivo Marín pudo identificar que estaba construida no por una mano humana, justo al lado una imagen que jamás podría olvidar.

 

                En el centro del templo se encontraba un esqueleto, imposible de poder reconocer, pero este estaba vestido con una túnica que la santo de plata fácilmente podría reconocer: Ese cuerpo perteneció al santo dorado de Aries y patriarca Shion. La santo de águila corre inmediatamente en dirección al santuario.

 

                Horas después, fuera de la casa de piscis, el santo de bronce de Pegaso yacía en un mar de rosas que cubrían la entrada al santuario del gran patriarca. A la distancia la misma mujer que venía de descubrir este terrible secreto se acerca a Seiya.

  • No puedes morir Seiya – Le dice Shaina mientras lo toma y continúa el camino – Mi máscara te protegerá de las rosas de Aphrodite, pero una vez lleguemos a la entrada del falso patriarca estarás solo.
  • ¿Falso patriarca? – Responde Seiya débilmente bajo la máscara de Marín - ¿A qué te refieres con eso?
  • Fui al monte de Athena y encontré el cuerpo deteriorado de Shion, el antiguo patriarca. Sea quien sea el hombre que te espera no es Shion… es alguien más – Marín cae al suelo en la entrada al templo del gran patriarca, Seiya le devuelve su máscara y se coloca de pie – Seiya, estoy débil y no podré ayudarte.
  • Ikki, Shiryu, Hyoga, Shun y ahora tu Marín… - Nadie morirá… - Seiya ingresa a los aposentos del patriarca.

                En la casa de Virgo, una pequeña energía luminosa surge de la nada. De esta sale el santo de Virgo Shaka, en sus brazos se encontraba un derrotado santo de Fénix que de a poco estaba empezando a recuperar la consciencia.

  • Ikki – Dice Shaka calmadamente – Escúchame
  • ¿Por qué me has traído de vuelta? – Pregunta molesto Fénix al momento de colocarse de pie
  • Me has demostrado que estuve equivocado. Pude sentir el poder de Athena en tu ataque, y tengo claridad de que hay algo más grande tras nosotros. Ikki – Le dice Shaka con una voz serena – Le he pedido a Mu su ayuda para traerte de vuelta a este mundo. Debes enfrentar al patriarca, en este momento solo tu podrás.
  • ¿Porqué no lo haces tu? ¿No es misión de ustedes también proteger a Athena? – Contesta desafiante Ikki
  • Porque eso es lo que haré. En este momento Pegaso se dirige al templo del patriarca. Tu misión será ayudarlo y proteger a Seiya. Este debe alcanzar el escudo de Athena que se encuentra en su estatua. – Shaka se coloca serio al decir estas palabras – Debes decirle que lo apunte hacia la casa de Virgo. Solo con esa energía podría despertar a Athena… - Ahora Ikki… te espera un camino de dolor, no puedes detenerte por nada. – Shaka detiene a Ikki antes de que parta – Debes sobrevivir, Fénix.

                Ikki confundido comienza su camino por las casas restantes y es testigo de los estragos que ha causado esta guerra. En la casa de Libra y escorpio, el santo de Fénix descubre que se encontraban deshabitadas mientras que en la de sagitario se podía observar a un santo dorado inconsciente al lado de la armadura de Sagitario.

 

                El escenario cada vez se volvía más aterrador ya que al ingresar a la casa de Capricornio y Acuario el santo de Fénix ve los cuerpos casi muertos de Shiryu y Hyoga. Todo esto ayudó a preparar mentalmente a Ikki para enfrentarse al panorama que vería en la casa de Piscis.

  • Shun – Dice Ikki observando el cuerpo agonizante de su hermano junto a un muerto Aphrodite – Debo completar mi misión…. No mueras

                El camino continúa e Ikki se abre paso por el campo de rosas con facilidad, esto principalmente debido a que sus llamas las incineraban antes de poder lastimarlo. Finalmente, al ingresar a la recama del patriarca observa a un herido Seiya siendo a punto de ser eliminado por un santo dorado. 

 



#77 Pojoyuelo

Pojoyuelo

    Miembro habitual

  • 50 mensajes
Pais:
Chile
Sexo:
Masculino
Signo:
Virgo
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 31 marzo 2020 - 18:20

18.- Ares de Géminis

 

                El santo de Pegaso había logrado con la ayuda de sus compañeros de armas; llegar hasta el último templo. El del patriarca. En este se encontraba un hombre alto con cabello blanco. El hombre tenía en sus manos el casco perteneciente al patriarca.

  • Pegaso – Dice el hombre con cabello blanco – No esperaba menos de ti. El santo que logró dañar a Hades… Eres una leyenda entre los olímpicos. ¿Sabías? – El hombre termina de quitarse sus ropajes y levanta un brazo - ¿Sabías que? Una vez escuché a Zeus decir que si el invadiera la tierra, tu serías su primera víctima. – Una luz dorada cubre el cuerpo del hombre – Será una lástima, pero quizás con tu muerte me gane el favor de él.
  • Descubrimos el cuerpo de Shion… Tu no eres el patriarca… ¡¿Quién eres?! – Grita Seiya mientras ataca al hombre
  • ¡Soy Ares! – El hombre es rodeado por la armadura de Géminis - ¡El dios de la guerra! Y Athena va a morir

                Seiya intenta atacar al santo de Géminis, pero este lo detiene con un destello de energía que lo lanza contra los pilares del templo. Ares con su energía levanta a Pegaso y lo azota incontables veces contra todos los pilares del lugar.

 

                El santo de Pegaso se levanta con dificultad, siempre pensando en lograr derrotar a Ares por Athena. Pero este al ver el poder del dios de la guerra se da cuenta que no sabe como revivir a Athena, que quizás sería la única que podría derrotarle.

  • Es inútil resistirse Pegaso. Solo hay una manera de salvar a tu diosa. – Ares vuelve a golpear a Seiya – Solo un dios sabría como quitar esa flecha del pecho de Athena.

                El santo de Géminis muestra ser un poderoso oponente para el santo de Pegaso. Este prácticamente esta jugando con el derrotado cuerpo del santo de Pegaso. Seiya intenta colocarse de pie pero es inútil. Uno de los ataques que habían impactado contra su cuerpo le había quitado casi todas sus energías. Finalmente Géminis esta dispuesto a dar el golpe final pero es alcanzado por un rayo ardiente que salva a Pegaso.

  • Escúchame Seiya – Dice Ikki a un herido Pegaso – Debes alcanzar el escudo de Athena y apuntarlo a la casa de virgo. Es la única manera de quitarle la flecha. Debes ir. Yo me encargaré de Géminis
  • Ikki – Dice Seiya abriendo sus ojos – Shun…
  • Hizo lo que tenía que hacer… - contesta en seco Fénix – Ahora ve

                Ares intenta atacar al santo de Pegaso, pero es detenido por el Fénix que lo ataca con una fuerza ardiente. El santo de Géminis cae al suelo sorprendido mientras pierde de vista a un herido Seiya. Ikki vuelve a atacarlo, pero esta vez el dios de la guerra logra defenderse.

 

                Ambos santos explotan su poder mientras que Seiya continúa su camino hacia el escudo. El santo de Pegaso lucha con no caer inconsciente después de la paliza que recibió durante todo el día. Finalmente logra vislumbrar la estatua de Athena junto al escudo que Ikki le contó.

  • No puedo caer – Dice Seiya muy herido – Athena… Athena debe despertar antes que muera… - Hermana Seika… lo siento… nunca pude encontrarte… Debo llegar al escudo lo antes posible. No puedo perder, he llegado muy lejos. Shun… Hyoga… Shiryu… Ikki… debo llegar.

                Mientras el santo de Pegaso continúa su camino Ikki es golpeado brutalmente por el dios de la guerra que aprovecha esta ventaja para ir detrás del santo de Pegaso. Este logra impactarlo en la espalda. Pero antes de poder acabar con el nuevamente aparece el santo de Fénix protegiendo a Pegaso.

  • Malditos santo de Athena ¿No se dan cuenta que ella fracaso? – Dice Ares molesto – Mis santos de plata… Death Mask… Aphrodite… ellos sabían la realidad… solo mi poder puede derrotar a Hades.
  • Quizás estés en la razón Ares – Contesta Ikki – Pero no es tu derecho gobernarnos. 
  • Lo haré de nuevo. – Contesta severamente Ares - Esta bien, de todas formas ya les di su propia oportunidad, la desecharon como originalmente pensé. Cuando acabe con ambos y Athena ya no esté con ustedes, acabaré personalmente con todos los santos dorados, de plata y bronce que se me opongan. Nunca debí haber confiado en los santos… pero esta bien… -Ares sonríe por primera vez – Mis Berserkers acabarán con el santuario, luego atacaremos el castillo de Hades para terminar con esta guerra…
  • Ya veremos… - Ikki sonríe observando detrás de Géminis donde Seiya estaba de pie junto al escudo de Athena.

                Seiya, sin saber lo que hacía toma el escudo de Athena y como le había dicho hace unos minutos el santo de Fénix, este lo apunta en dirección a la casa de Virgo. En esta el santo que la protegía siente como la energía divina llena su armadura dorada. Con ayuda de su poder logra contactarse con el santo de Aries.

  • Mu, soy Shaka – Le dice por medio de sus poderes – Es hora, prepara a los santos
  • Muy bien Shaka – El santo de Aries se dirige a sus compañeros – Seiya le ha enviado el poder a Shaka, en segundos se redirigirá al templo de Aries. Aldebarán… Aioria…  Milo… Prepárense.

                Una luz, parecida a un cometa sale desde la casa de Virgo hacia la de Aries, esta cae sobre los cuatro santos dorados que redirigen la energía hacia la flecha dorada. Esta desaparece en un abrir y cerrar de ojos logrando que Athena abra sus ojos inmediatamente.

  • Athena – Dice uno de los dorados – Soy Milo de Escorpio. Estos son Aldebarán de Tauro, Mu de Aries y Aioria de Leo, el es el hermano menor de Aioros de Sagitario. Debemos ir a la cámara del patriarca, nos espera también Shaka de Virgo.
  • Lo sé… gracias valientes caballeros – Dice Athena con voz decidida – Presiento que hay dos santos dorados que aún están con vida y necesitan mi ayuda.
  • Athena te seguiremos hasta la muerte – Dice Mu que se arrodilla ante ella junto a los restos santos dorados y su discípulo Kiki.

                Los santos, acompañados por Athena se dirigen hacia el templo de Ares para ayudar a los santos de bronce que se encuentran en peligro al enfrentarse al dios de la guerra. El reloj de fuego se apaga y las 12 horas se han completado. Pese a esto el combate aún no termina.

 



#78 Cannabis Saint

Cannabis Saint

    Miembro de honor

  • 2,687 mensajes
Pais:
Honduras
Sexo:
Masculino
Signo:
Sagitario
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 31 marzo 2020 - 22:50

Muy buena la utilización de los dorados y justificar así su ausencia, a ver qué sigue luego!

#79 Patriarca 8

Patriarca 8

    Miembro de honor

  • 16,112 mensajes
Pais:
Peru
Sexo:
Masculino
Signo:
Cancer
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 01 abril 2020 - 09:58

14.- Aioros de Sagitario

 

la tecnica de virgo es un arma de doble filo

 

Marín fue de gran ayuda en este capitulo

 

 

 

15.- Shura de Capricornio

 

 Shura reconoce el poder del sensei heroico

 

 


fwoTpjp.pngd2846x5-c33eb060-952a-40e4-b79b-ac99f8b9

 

 

 


#80 Pojoyuelo

Pojoyuelo

    Miembro habitual

  • 50 mensajes
Pais:
Chile
Sexo:
Masculino
Signo:
Virgo
Energia:
Cosmos:
Ataque:
Defensa:
Velocidad:
Victorias:
0
Derrotas:
0
Total:
0

Publicado 02 abril 2020 - 12:36

19.- La purificación

 

                Las doce horas habían llegado a su fin, la torre que marcaba con fuego cada templo del santuario se había apagado. Pese a esto y la oscuridad de la noche, una imagen rodeada de luces doradas camina por la escalinata con rumbo al templo del patriarca. Al llegar al templo de virgo estos logran reunirse con el santo que había ayudado a la diosa.

  • Lo siento Athena – Dice Shaka ante la mujer al colocarse de rodillas – Durante los años, dudé sobre el patriarca, hasta el punto que pensé que podría tener razón. Pero tus santos de bronce… nos hicieron ver la luz… Athena mi lealtad, como todos los santos de virgo antes que yo, es tuya.
  • Debemos ayudar a los santos caídos – Dice Athena con una dulce voz – Aún siento que se mantienen con vida.
  • Los santos de Andrómeda, dragón y cisne se encuentran con vida. Pero no despertarán de los daños. Si bien en sus combates las fuerzas estaban parejas, al no contar con la protección de las armaduras de oro… Athena los daños podrían ser irreversibles. – Shaka se levanta – Athena, los de bronce ya hicieron su parte y merecen el descanso, no podemos hacer nada por ellos, pero debemos confiar en que podrán hacer otro milagro. Es nuestro deber detener al patriarca.
  • Hemos perdido a muchos compañeros por culpa del patriarca – Dice Aldebarán notablemente afligido. – Athena, le pido el favor de hacerme cargo del patriarca. Nadie más debe morir.
  • Aldebarán, el santo de Tauro, el mayor entre todos nosotros. Tú pudiste conocer a una generación anterior, y créeme que no dudo de tu determinación. Pero no dejaré que nadie más muera por mí. Cuando lleguemos al templo del patriarca, no interferirán, pase lo que pase.

                Los santos de oro asienten no convencidos por la orden de Athena, todos continúan su camino hasta la casa de sagitario en donde pueden observar la armadura de Sagitario que reacciona ante la presencia de Athena. Lo mismo ocurre con la de Capricornio, y Shura que se encontraba apoyado de esta Cloth levanta su mirada y se arrodilla pese al notorio esfuerzo que eso generaba.

  • Shura, levántate – Le dice Athena con una voz suave – Has sufrido suficiente… lo siento. –Athena levanta su báculo y una luz dorada envuelve a Shura, este sorprendido observa como su cuerpo sana completamente.
  • Athena… no merezco tu piedad… He sido una vergüenza para esta armadura. Me he dado cuenta tarde y por culpa de eso… Dragón… no he podido salvarlo. Athena… si es posible con gusto cambiaré mi lugar por él. – Shura es interrumpido por una cálida sonrisa de Athena
  • Shura… dame la mano… esta vez no te dejaré solo. Lo siento Shura – El santo de capricornio queda sorprendido por estas palabras y se coloca de pie – Llévame donde Shiryu

                Los santos continúan su camino. Estos llegan donde Shiryu permanecía completamente inconsciente. Athena se acerca al santo de bronce y repite lo que hizo con Shura. Pero si bien el cuerpo logra sanar completamente, el santo de dragón no despierta.

  • Athena… - Dice Mu de Aries - ¿Qué significa esto? ¿Por qué funciona con Shura y no con Dragón?
  • Debemos llevarnos a Shiryu, ya no corre peligro su vida, pero despertar será algo que le costará. Hay algo… una energía divina que me impide llegar a su mente. – Athena ordena a Shura tomar el cuerpo de Shiryu y continúan su camino hasta el templo de Acuario.

                Al llegar al templo de Acuario, los santos junto con Athena, observan como Camus, el santo dorado de Acuario estaba junto al cuerpo congelado de Hyoga del cisne. Athena se acerca a Camus y hace lo mismo que hizo con Shura, pero de nuevo esto no funciona con Hyoga.

  • Athena… - Dice Acuario arrodillado – Te pido tu misericordia.
  • Camus… estuviste dispuesto a dar tu vida para terminar de entrenar a Hyoga, no para proteger al Patriarca. – Athena sonríe – No hay nada más que pueda admirar de un maestro como eso. Lamentablemente si bien su cuerpo está en perfecto estado. Es la mente que se ve dañada al igual que Shiryu. Camus acompáñame y lleva a tu alumno, la batalla aún no termina.

Los santos llegan al templo de Aphrodite, en donde ven que el santo dorado yacía muerto en el suelo, al igual que le había ocurrido a Deathmask ene l templo de Cáncer. Athena se acerca al cuerpo de Shun, y de la misma manera logra detener el veneno de la rosa clavada en su pecho. A diferencia de esto, Shun logra despertar. Muy confundidos todos continúan su camino al templo del patriarca.

  • Athena… - Advierte Shura – Siento un terrible poder emanando del templo. El cosmos de Seiya ha caído completamente, dudo que esté vivo. Pese a eso hay alguien más que está conteniendo su poder. Pero dudo que pueda derrotarlo. – Shura se arrodilla nuevamente – Athena, permítame dar mi vida por la suya, por Shiryu, por Aioros
  • Nadie morirá más hoy Shura – Athena continúa su paso ante la puerta del patriarca. Ante la mirada atónita de los santos dorados.

                Athena abre la puerta del templo del patriarca, aquí observa un espectáculo desgarrador. El templo se notaba afectado por la batalla, pero no había señales de sus protagonistas. De repente una voz femenina acude a Athena.

  • Athena – Dice una herida Marín de Águila – Sabía que Seiya lo lograría…
  • ¿Dónde está Seiya? - Pregunta a Athena mientras curaba a la santa.
  • Esta junto a Saga de Géminis e Ikki de Fénix…

Los santos continúan su camino y llegan finalmente a los patios de Athena. Allí el escenario era desgarrador, ya que se encontraba Seiya completamente derrotado con su armadura gravemente dañada, este mantenía aún el escudo de Athena en sus brazos pese a estar inconsciente.

  • Athena… Despertaste… - Dice Saga soltando a Ikki que cae al suelo completamente inconsciente – Me aseguraré que eso no vuelva a pasar.





1 usuario(s) están leyendo este tema

0 miembros, 1 invitados, 0 usuarios anónimos


Este tema ha sido visitado por 16 usuario(s)

  1. Politica de privacidad
  2. Reglas generales ·