SINOPSIS
2025 d.e.c.- China sorpresivamente concede la independencia del Tíbet y le cede 45,600 km de su propio territorio. La nueva nación adopta el extraño nombre oficial “Harbinger presenta: Nueva nación soberana e independiente Tíbet”.
2030 d.e.c.- Cthulhú aparece en el Pacifico asolando las costas norteamericanas. Canadá le pide disculpas.
2033 d.e.c.- Tras dolorosas perdidas y tres años de lucha los santos de Athena consiguen cerrar la entrada a R´ley y encerrar a sus habitantes dentro. Sin embargo esto les cuesta el anonimato y el mundo conoce la existencia de los dioses.
2072 d.e.c.-A casi 30 años del Armagedón el mundo aun está sumergido en caos. USA no puede mantener su hegemonía y termina separándose en tres; con ayuda de América Latina la costa este y los estados de Arizona, Nuevo México y Texas formaron un estado independiente. La costa oeste y las Californias son ocupadas por China. El medio oeste de la anterior USA es renombrada Disneyland, su capital Hollywood se asienta en la antigua Chafachussets.
2091 d.e.c.- La guerra norasiatica, iniciada a causa de la invasión de China en América veinte años antes, concluye con la victoria triada. Corea es unificada y reclama parte del sur chino; las costas del mar amarillo y Hong Kong son rebautizados como Japón continental; Mongolia desaparece absorbida por el renacido imperio Ruso.
2097 d.e.c.- Comienza un movimiento global de adoración a viejos dioses provocando el colapso de las religiones monoteístas de occidente. Venezuela, Colombia, Ecuador, Guyanas y Bolivia se convierten en el “Imperio Bolivariano Democrático Socialista Interplanetario” y adopta el chaverizmo como religión oficial del estado. El santuario ateniense es apreciado a nivel mundial y se le implora intervenir en la restauración del orden, sustituyendo la entonces incompetente Organización de Naciones Unidas.
2104 d.e.c.- El anciano patriarca reestructura el calendario asignando trece meses al año y dándoles nombres a su discreción, cambiando el inicio de este al solsticio de primavera. La decisión es aceptada a nivel mundial. Muere a dos meses de cumplir 120 años el 5 de Pepsi de 2105.
2170 d.e.c.- La profesión de santo es popular a nivel mundial, llegando a establecerse 1200 palestras no avaladas por el santuario alrededor del mundo. El combate entre santos es un espectáculo tan popular que un santo de acero puede ser rico y famoso al final de su carrera. A pesar de no tener vinculo con el santuario de Athena, los santos espurios hacen el juramento a la diosa como rito de iniciación.
2210 d.e.c.- Una bebe es encontrada a los pies de la estatua del santuario, augurando el fin de un siglo de paz.
2230 d.e.c.- A causa de pesadillas recurrentes y sueños premonitorios la diosa Athena consulta el oráculo de Delphos, este le vaticina: la furia Cronida comienza en el Estigia.
La batalla de Epiro
La noche es vieja y el viento hostil acrecienta el frió, llevamos dos días con sus noches esperando afuera de una cueva olvidada a que esta vomite el infierno. El cielo está nublado, como evidenciando la presencia del viejo y sexopatá padre de dioses quien, curioso, espera el derramamiento de sangre que se aproxima para saciar su morbo.
Insisto, hace frió y el ambiente no ayuda, en esta lúgubre noche el terreno yermo y los álamos ennegrecidos presentan un escenario tétrico; solo la luz del plenilunio reconforta, por su posición intuyo que son las tres de la mañana, es suficientemente brillante para atravesar las nubes e iluminar el páramo; como me gustaría ver mi constelación guardiana ahora. Podría elevar mi cosmos y crear una barrera protectora que me aislé del frió pero siento que sería hacer trampa, a diferencia de mis compañeros disfruto las sensaciones que se experimentan siendo humano, como este frió, esta ansiedad o este cigarrillo.
Empiezo a disfrutar la vigilancia cuando pregunta salvaje aparece:
Keiko: ¿Qué haría el patriarca Harbinger en estos momentos?
Alí: Seguramente bajaría otra vez al Erebos a pelear mano a mano con Hades y lo derrotaría nuevamente con su poderosa Genkidama. Después del legendario Ichi el “asesino de titanes” fue el santo más poderoso al servicio de Athena.
Kai: Leí en Pallaspedia que después de vencer a Hades Athena quedo tan impresionada que quiso darle un hijo como premio.
Leonel: Jabú el poderoso era mejor, el salvo infinidad de veces a su hijo: Soma de Pegaso. El reventó a los marinas mientras el lobo Ryuho, hijo de Shun el masculino santo de Fénix, freía a Poseidón con su rasho laser y que juntos derribaron el Muro de los lamentos con un trozo de kriptoni...-¡¡SUFICIENTE!!- no podía aguantar tanta estupidez y decidí callarlos, ¡¿cómo podían estar tan confundidos?! , es verdad que perdimos muchos registros históricos cuando Chtulhú destruyo internet, pero no esperaría que la fuente de conocimiento de esta juventud sean rumores y viejas películas CGI ¡como maldigo esas películas!. Le di una calada al tabaco para calmarme y pensar mis palabras… - El patriarca Harbinger escribió varios libros; “El código moderno de caballería al servicio de Athena”, el “Integrazione del mio Desiderio” y el “Tauronomicón” definitivamente son de su autoría, pero él jamás escribió una autobiografía ni registro pelea alguna contra Hades, todo lo que sabemos sobre el señor de los muertos y el viejo patriarca solo son rumores y mitología, hasta donde se ningún santo que peleo directamente con Hades sobrevivió y si lo hizo, no dejo registros al no saber leer ni escribir pues para ser santo es tradición dejar la escuela.
Volvía a aspirar mi Manigoldo’s 4242 Classic mientras disfrutaba la atención de mis colegas. Hasta Angel quien viste el manto de Perseo y es mi superior inmediato mostraba atención a mi cátedra, hizo que me sonrojara. La rara santa de Delfín me saco de mis pensamientos invitándome a que prosiguiera:
Keiko: Maestro-sama-dono-kun-sempai ¿cómo sabe tanto sobre los tiempos del antiguo patriarca?
Exhalo el humo por la nariz mientras reflexiono sobre la falta de juicio de mi pupila, la miro, una quinceañera encantadora de ojos grandes y bello rostro, detesta las mascaras como casi toda su generación, “es tonto maquillarse si usas máscara” excusan. Su lindo cuerpo y largas piernas le garantizarían popularidad en los torneos galácticos, pero aquí solo es una insipiente saintia con pérdida de identidad cultural –Estudie la vida en los tiempos del antiguo patriarca siempre que pude -respondí- naci en la misma ciudad que él y viví una infancia similar. La historia y ejemplo de los antiguos caballeros es la razón por la que jure lealtad a nuestra señora.
Angel: ¿Entonces Harbinger era de Norteméxico?
No-conteste- En ese entonces era conocido como Estados Uni…
La tierra tiembla y horribles alaridos salen de la cueva, provienen de miles de espantosos espectros que escapan de la caverna y se esparcen por el cielo, oscureciéndolo. Logro distinguirlos, son túnicas cenizas, gastadas y raídas con chispeantes carbones al rojo como ojos, la oscuridad que proveen sus capuchas impiden ver sus rostros y la única parte visible de sus seres son sus manos descarnadas, parecen no tener piernas, no las necesitan. Nos atacan, o lo intentan; se abalanzan sobre nosotros enfilando sus huesudas garras a nuestras yugulares pero no pueden tocarnos, nos atraviesan, solo consiguen que los soldados defequen en sus pantalones o se desmayen a lo mucho, solo son una distracción.
Un ejército sale de entre los árboles, llevan enormes escudos redondos y lanzas igualmente grandes; visten grebas plateadas y petos broncíneos, no todos llevan casco, es reconfortante comprobar que por lo menos parecen humanos. Están en formación y siguen órdenes de tambor y cuerno, son un ejército entrenado. Se enrarece el aire y se siente la tensión; cada escuadrón es independiente y obedecen a un santo dorado o plateado a cargo y el grupo contiguo al nuestro lo hace evidente, Salomón de Heracles, siempre confiando en su brutal fuerza, ruge la orden y enfila sus tropas a un ataque directo.
“¡Estúpido!”, Angel solo alcanza a mascullar una y otra vez “¡estúpido!”. La tropa de Salomón, compuesta por los santos de osa menor, regla, paloma, cisne y cien caballeros de acero atacaron cual barbaros en carrera contra un pueblo indefenso y así fueron aniquilados. No habían terminado de recorrer un tercio de la distancia que los separaba del enemigo cuando una llamada de cuerno convoco un sorpresivo aluvión de flechas sobre ellos. Las armaduras de acero son resistentes pero protegen poco, siendo que la mitad de los aceros al mando de Heracles yacían en el suelo con flechas incrustadas en sus vientres y cuellos, el ejercito de lanzas escondían tras de sí un escuadrón de arqueros. Cualquiera ordenaría una retirada y reagrupación, pero el salvaje y poderoso Salomón, alto como un camello e imponente como un león era muy orgulloso para ser cualquiera. Arrastrándose lastimosamente, uno a uno de la legión Heracles iba cayendo, sus movimientos se hacían torpes y lentos, el ejército de lanceros ni siquiera los ataco, esperaron a que la presa llegara a ellos; era evidente que las flechas estaban envenenadas y eso me hizo pensar si no habría visto esto antes. ¡Son Griegos! –Exclamo Angel, quien por fin había recuperado la compostura- Los lanceros son hoplitas y tienen apoyo de toxotes, tal vez tengan Katapelticos o Scorpios, debemos rescatar a los heridos y atenderlos rápido, los acerosos y yo atacaremos a distancia mientras tú y los bronces salvan a Salomón y sus hombres.
La orden fue dada y emprendimos la batalla. Perseo se movió en formación cerrada con la tropa de acero, motivando a las tropas cercanas a hacer lo mismo, resistiendo el embate de las flechas con los escudos magnéticos de los trajes de acero, inútiles para detener un golpe de cosmos pero más que suficiente para flechas comunes, los arqueros ya no darían problemas. Cuando llegamos a Salomón este estaba a veinte metros de los hoplitas, su cuerpo parecía un enorme alfiletero en convulsión y una expresión de ira e impotencia en sus ojos abiertos. Falleció en la guerra de Hades sin poder dar ni un solo golpe, siento pena por él. El escuadrón completo de Heracles murió con él, nuestros compañeros agonizantes terminaron de morir en nuestros brazos; es increíble lo fácil que un santo de Athena puede caer ante un arma tan primitiva, después de todo seguimos siendo humanos.
No podemos llevarnos a los caídos, tenemos que esperar hasta después de la batalla así que nos apresuramos a terminarla. Los hoplitas se mueven enfilando sus lanzas y anteponiendo sus escudos, una formación eficaz si no fuera por el laser equipado de los acerines. Perseo aun no usa su escudo, es inteligente y sabe que un muro de espectros de piedra nos significaría un obstáculo, solamente se limita atravesar escudos con su puño y romper lanzas con su cosmos, casi lo hace parecer divertido, así que voy en camino a la fiesta.
Un sonido corta el aire, inmediatamente Angel cae al suelo junto con quince o veinte caballeros de acero, fueron cortados y sus cuerpos arden. De entre las llamas surge una bestia con ropas extrañas, no parece griego y me desconcierto más cuando Keiko lo nombra: ¡es un samurái!. Rápidamente el demonio me embiste y escapo a su espada solo por instinto, acorto la distancia para inutilizar su hoja y regresarle la gracia con 5 garras en su cuello, grave error. Su boca y cuello estaban cubiertos por una máscara con forma de hocico de demonio y expresión amenazante, contrastaba con su mirada fría e insensible, casi muerta. Tomo mi brazo y tiro hacia él y empujando con su cuerpo consigue hacerme retroceder, desequilibrándome y liberando su espada, que de un movimiento ascendente rebano el peto de mi manto desde mi costilla inferior izquierda hasta el hombro derecho, aun no sé como logre escapar a la muerte. Reacciono y enciendo mi cosmos y hago retroceder al demonio, creo que aun tengo oportunidad si consigo asestar uno solo de mis golpes… que ingenuo fui. Solo necesitó un momento, el momento que le di al concentrarme, para que el samurái terminara conmigo.
Siento los latidos de mi corazón en la cabeza y estoy mareado, los sonidos se oyen lejanos y se están apagando. Solo tengo certeza del frio acero moviéndose en mis entrañas intentando salir, caigo de rodillas y alcanzo a ver al demonio mirándome con desprecio, se da la vuelta, no fui rival para él. Mis pensamientos caen en mis compañeros caídos, los acerosos, Salomón… Angel... recuerdo su cabello meciéndose en el aire vespertino durante los entrenamientos... su bronceada piel, lozana y tersa, recuerdo cada cicatriz en la piel que podía alcanzar a ver cuando tomaba un baño… recuerdo cuando cayó al suelo momentos antes y siento la tristeza de nunca contemplar el rostro tras su mascara. A continuación escucho lejano un grito familiar, es la técnica especial de uno de mis muchachos, pero no oigo que la termine y eso me angustia. Escucho al resto de mis discípulos emitir un grito de agonía y no lo puedo soportar, se enciende la ira en mi ser, dándome fuerzas para un ataque más. Me pongo de pie y levanto la cabeza, La bestia está de espaldas, y lo aprovecho para lanzar un golpe de ken consiguiendo lastimarlo ¡la bestia puede caer y eso me da esperanza!. Se pone de pie y se quita la máscara, el demonio que mato a mis hermanos no era más viejo que mis pupilos; tenía un rostro lozano, una piel clara y una boca pequeña, enmarcado en un rostro ovalado, creería que es una chica si no fuera por esa mirada insensible y desdeñosa.
Soy Hitodama Senzō –el demonio habla- samurái errante y siervo del señor de la Guerra, por quien nunca conoceré una muerte tranquila y a quien ofrezco la sangre que derrama mi espada y quiero saber el nombre del guerrero que muestra valor ante mí y a quien me enfrento.
-¡Soy John Victoria, santo de plata al servicio de Athena, maestro y amigo de jóvenes caballeros, a los que hiciste cerrar los ojos. Soy quien porta la túnica de Hidra macho a la que mancillaste y juro que hare pagar a ti y a tu dios por todos sus pecados!.
Hitodama: John Victoria de la Hidra, juro que no te olvidare.
¡Y yo juro que no te haré olvidar a tu p#t@ madre, METEORO DE HERACLES!