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En primer lugar, quiero darle las gracias a Casa Asia, que fue donde realicé este curso. Casa Asia es una asociación que está realizando toda una labor excelente para enseñarnos a los españoles todo sobre la cultura asiática, desde Oriente Medio hasta Japón (también le dan cierta importancia a Oceanía). También fue aquí donde estudié uno de los cursos de japonés que hice.
También es obligatorio agradecer a las editoriales Ponent Mon, Norma Editorial y Dolmen Editorial, quienes patrocinaron este curso y aportaron material (mangas y material de dibujo) para el curso.
El curso tuvo una duración de 12 horas, y lo realicé del 18 al 26 de mayo. El profesor fue Ken Niimura, un español de padres japoneses nacido en España que ya ha publicado varios mangas en nuestro país, tales como “Soy una matagigantes”. También hizo los diseños de “Japonés en viñetas”.
Sin más, procedo a enseñaros todo lo que ví. ¡¡¡Que lo disfrutéis!!!
Los orígenes del manga:
¿Dónde podemos encontrar los orígenes del manga? ¿Quién podemos decir que fue la persona que estableció las “normas” del manga? Pues si tenemos que ponerle nombre y apellidos a esa persona, tenemos que decir que fue Katsushika Hokusai (1760-1849). ¿Por qué él?
De entre sus obras cabe destacar sus treinta y seis vistas del Monte Fuji, publicadas entre 1826 y 1833. Esta colección de dibujos ya tenía la típica estructura en viñetas y también llegaban a salirse algunos dibujos del borde de las mismas, tal como ocurre actualmente (por ejemplo, la cima del Fuji saliéndose por la parte superior de la viñeta). El más famoso de sus dibujos es “La Gran Ola de Kanagawa”:
Pero en los orígenes de manga, también debemos nombrar a otro autor, mucho más reciente, llamado Osamu Tezuka, y apodado como “Padre del manga” o “Dios del manga”. Y eso por qué?
Si nos fijamos en el ánime japonés, ¿cuál es la principal diferencia respecto al resto de dibujos animados del resto del mundo? En el propio Saint Seiya podemos verlo… ¡¡¡Correcto!!! ¡¡¡Los ojos!!!
Podemos decir que a Tezuka le gustaban mucho los dibujos animados, especialmente los de Walt Disney. Por aquella época, los Mickey Mouse y compañía tenían unos ojos enormes, lo que provocó que los dibujos de Tezuka tuvieran esos ojazos y que luego el resto de mangakas, al realizar el estilo de Tezuka, que tuvieran el mismo tipo de ojos. Una de las obras más famosas de Tezuka es Astroboy, del cual todavía siguen realizándose ánimes hoy en día.
Esto nos dá a entender que ese tópico que se ha oído muchas veces de que los mangakas realizan los personajes con ojos grandes para que no parezcan japoneses, sino personajes más occidentalizados, es falso.
Diferencias entre el cómic japonés y los cómics del resto del mundo:
Alrededor de todo el mundo podemos encontrarnos con diferentes tipos de cómics. En Estados Unidos es típico el cómic de superhéroes. En Francia y en Bélgica es muy popular el cómic “bandes dessinées”, que ha influenciado a toda Europa e incluso a autores hispanos (por ejemplo, Tintín). En España son muy populares los tebeos (Mortadelo y Filemón). Y por último, en japonés lo que triunfa es el manga.
Pero… ¿qué le ha diferenciado al manga del resto de cómics para hacerse tan popular? Ya hemos hablado de los ojos. Este elemento hace que los lectores se centren más en los personajes, y además, mediante los ojos es más sencillo ver sus sentimientos.
Otra cosa muy importante que ha influenciado al cómic japonés, es el cine. Tras la II Guerra Mundial, Hollywood llega a Japón y los autores son fuertemente influenciados. Esto ha provocado que en los mangas las viñetas tiendan a mostrar muchísimos primeros planos, en los que veremos muy bién las caras de los personajes y que también nos ayudará a que el lector se fije más en los personajes y también a que vean mejor sus sentimientos.
Por otro lado, en Europa los cómics son más “teatrales”, en los que normalmente veremos a los personajes completos de la cabeza a los piés.
Para terminar, otra cosa que diferencia al cómic japonés del resto del mundo, es que los personajes suelen recordar cosas de su vida. Saint Seiya es un claro ejemplo cuando los personajes cuentan sus anécdotas durante las batallas.
Las claves del éxito de un manga:
En todo manga debemos tener en cuenta una serie de factores para que pueda tener éxito. En primer lugar, un manga tiene que ser único. Conviene que sea una historia nueva, que no haya sido tratada anteriormente, que sea novedosa (aquí pongo como excepción a Dragon Ball, cuya historia, basada en el Rey Mono, está veinte mil veces narrada en el manga japonés).
Un manga también tiene que ser divertido. Si la historia no tiene puntos divertidos en los que se interrumpa momentáneamente la historia, el manga se hará monótono y aburrido, y el lector lo acabará dejando a un lado.
Y por último, la historia del manga tiene que acercar al lector. Hay que hacer que el lector se siente dentro de la historia, como si fuera un juego de rol.
Otros factores que debemos tener en cuenta, es el diseño de los personajes. Los personajes buenos tenderán a tener un diseño con curvas suaves. Los buenos tendrán ojos redondos, mientras que los malos tenderán a tener unos diseños más picudos y unas pupilas más chicas.
Los nombres de los personajes deberán ser descriptivos. Saint Seiya es un claro ejemplo de ello. Basta con buscar la etimología de los nombres de los personajes por internet.
Habrá que idear una gama de colores para cada personaje. Es muy típico que el “prota” vaya de rojo (Seiya), que las chicas lleven algo rosa y que los malos o personajes sospechosos tengan tonos negros. De esta forma, le daremos al espectador información de forma indirecta de quién es el protagonista y quiénes pueden ser los malos.
También conviene que el diseño de los personajes principales sea más complejo que el de los personajes secundarios. Luego, según las opiniones de los lectores sobre los personajes secundarios, estos personajes podrán quedarse más tiempo en la historia del manga y tener un papel más relevante.
Fichas de los personajes:
Antes de realizar la historia de un manga, lo primero de todo que se hace es realizar una serie de fichas de los personajes principales. Estas fichas vienen a ser lo que es el equivalente a las fichas de los personajes con su armadura en Saint Seiya. Sobre estas fichas suelen realizarse tres páginas.
En una primera página tendremos el diseño del personaje, tanto por delante como por detrás, y este diseño ocupará la práctica totalidad de la hoja. Debajo de estos dibujos, suelen incluirse otros datos, como su edad, estatura, horóscopo, grupo sanguíneo, y una breve historia.
En una segunda página tendremos otros dibujos, como pueden ser su armadura, su arma, su habitación… También se incluirá una breve descripción.
En la tercera hoja se dibujará la cara del personaje en sus diferentes estados de ánimo. Esto luego lo deberemos tener en cuenta para dibujar al personaje con diferentes estados de ánimo en el manga.
Guión:
El guión en un manga, es similiar al de cualquier cómic, película o libro.
Un manga debe contener una serie de eventos que vayan provocando el transcurso de la historia. A lo largo de esta historia, deben ir apareciendo una serie de personajes, los cuales interactuarán con el protagonista o incluso pueden llegar a ser sus rivales. El protagonista también debe tener un objetivo que será la causa de sus acciones.
A lo largo de la historia del manga, también deberán ir sucediéndose una serie de desencadenantes, los cuales provocarán que el protagonista tome decisiones más complejas.
También deberemos tener en cuenta la temática de la historia. Deberemos tener en cuenta a qué público está dirigido el manga y así poder asegurarnos un mayor éxito.
El protagonista podrá enfrentarse a tres tipos de obstáculos durante su aventura:
1. Hombre contra hombre: El protagonista tiene que luchar contro un adversario.
2. Hombre contra entorno: El protagonista tiene que subir unas escaleras en un tiempo determinado.
3. Hombre contra hombre: El protagonista tiene un dilema moral.
¿Cómo debemos distribuir la historia de nuestro manga? Pues si dividimos nuestra historia en 4 partes iguales, la primera deberá ser una introducción, la segunda y la tercera deberán contener el desarrollo de la historia, y la última deberá tener el desenlace. Entre la primera y la segunda parte, y entre la tercera y la cuarta parte, deberá suceder un evento que cause un giro en la historia.
Esta estructura puede verse modificada en series de continuación, en las que el final de cada capítulo suele dejarse abierto y se suele contar algo del siguiente.
Narrativa:
Al realizar los diseños de las viñetas, normalmente utilizaremos estos planos, de los cuales deberemos utilizar en abundancia los primeros planos si estamos realizando un cómic japonés:
Esta cantidad de planos habrá que modificarla por tres, ya que estas misma escenas podremos verlas desde arriba (“picado”), de frente (“normal “) o desde abajo (contrapicado). El contrapicado será ideal para cuando nuestro protagonista se encuentra contra un malo.
También deberemos tener en cuenta la posición de los bocadillos, ya que si los ponemos en determinados sitios, estaremos indicando indirectamente al lector que se fije en un detalle específico de la viñeta.
Proceso creativo de un manga:
Siempre se dividirá en tres fases: preproducción, producción y postproducción:
PREPRODUCCIÓN:
- Diseño de personajes: Realizamos las fichas de los personajes.
- Guión: Decidimos la historia de nuestro manga.
- Story board: Dibujamos la historia de nuestro manga sobre papel. Primero sin viñetas, sólo con un dibujo descriptivo por página. Luego ya dibujamos nuestras viñetas en pequeñito.
PRODUCCIÓN:
- Boceto: Dibujamos, ya sobre el papel definitivo, los dibujos de nuestras viñetas. Todavía no nos preocuparemos mucho sobre el resultado final.
- Lápiz: Algunos utilizan un lápiz azul en vez de uno negro. Se trazan con lápiz las líneas definitivas.
- Entintado: Ya procedemos, con mucho cuidado, a trazar con tinta las líneas definitivas. Las zonas que haya que rellenar con tinta que no sean líneas, se marcan con una “X”. Primero se trazarán los bordes de las viñetas, luego los bordes de los bocadillos, y por último el contorno de los personajes.
- Borrado: Se borra todo lo que esté a lápiz (esperar primero a que se seque la tinta) y se entintan las zonas marcadas con “X”.
- Tramas/Grises/Color: Dependiendo del dibujo, se trazarán las tramas, tonos de grises o se coloreará.
- Blanquear fallos: Se tapan las zonas en las que nos hayamos salido al entintar el dibujo. Se puede blanquear con tipes o incluso pegando un trozo de papel blanco.
POSTPRODUCCIÓN:
- Creación de archivos: Escaneamos nuestros dibujos y los guardamos (imprescindible que sea en formato .tiff).
- Diseño: Realización de la portada, establecimiento de la tipografía, créditos…
- Impresión: Se lleva a una imprenta.
Y tal como me pidieron en el Club de la Orden de la Urna Sagrada, a continuación pongo un scan de los dibujos que realicé. Reconozco que dibujar se me dá rematadamente mal, así que si no queréis tener ni náuseas ni vómitos, no sigáis bajando...
¡¡¡Estáis advertidos!!!
