Problemas en la muerte del CHAVA JIMENEZ?

A falta del resultado oficial de la autopsia, la muerte de ‘Chava’ Jiménez fue la consecuencia de una “parada cardiorrespiratoria” que le sobrevino en la noche (22h.30) del pasado sábado mientras mostraba a unos compañeros un álbum de fotos de su mejor época de corredor. Pero, ¿qué pudo ocasionar ese problema cardiaco? Ayer, El Mundo ofrecía una información que, desgraciadamente, podría explicarlo todo, ya que al parecer poco después de su muerte en su habitación de la Clínica San Miguel apareció “una bolsa de unos cinco gramos de peso con una sustancia blanca que podría ser cocaína”.

La noticia de Luis F. Durán en el citado periódico añadía que ése es el atestado policial realizado por la Jefatura de Policía de Madrid, que entregó la bolsa, un recipiente plástico por más señas, a las autoridades judiciales, que se han hecho cargo del caso. Las hipótesis más pesimistas, por tanto, podrían confirmarse, aunque la última palabra la tendrá el resultado definitivo de la autopsia que se le practicó en la mañana del domingo en el Instituto Anatómico Forense.

Como se sabe, unas horas antes de su muerte, Antonia, la madre del ‘Chava’, habló con el ex corredor, quien le explicó que tenía un fuerte dolor de cabeza y molestias en una muela, por lo que ésta le aconsejó que se tomara una aspirina. Jiménez llegó a sentirse tan mal que pidió a sus compañeros que apagaran la televisión de la salita donde pasaban la tarde y solían reunirse. Luego, cuando parecía haber recuperado otra vez la sonrisa, falleció después de que tanto los responsables de la Clínica como del Samur, que fueron inmediatamente avisados, intentaran reanimarle.

Cinco gramos
Según el periódico El Mundo, que ha tenido acceso a la investigación, los responsables de la Clínica San Miguel encontraron después en su habitación un recipiente con un polvo blanco sospechoso, por lo que avisaron a la Policía, que halló “una bolsita plástica que contenía una sustancia blanca polvorienta que al parecer podría ser cocaína, por lo que este indicativo se hizo cargo de ella a fin de presentarla junto al posterior informe”.

En la Jefatura Superior de Policía se recibió, posteriormente, una llamada del Juzgado de Guardia número 18 instándoles a que volvieran de nuevo a la Clínica. Una vez allí, y según recoge el atestado policial, “el juez de guardia solicitó dicha sustancia a fin de que fuese la propia comisión judicial quien se ocupe de su remisión para su posterior examen”. Además, una muestra de su sangre ha sido enviada al Instituto de Toxicología para su análisis.

El juzgado de Instrucción número 18 de Madrid es ahora quien instruye el caso. Mientras la investigación avanza, la familia estudia tomar medidas judiciales para frenar las filtraciones.