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El dragon Cuenta la leyenda que Forcis y Ceto (el monstruo que mato Perseo para salvar a Andrómeda) tuvieron un hijo llamado Ladón (en griego Δρακον Λάδων, Drakon Ladôn) era un dragón de cien cabezas (de ahí el ataque de Shiryu “Rozan´s 100 Rising Dragons”) cada una de las cuales hablaba una lengua diferente que guardaba el jardín de las Hespérides, por lo que también se le conocía como Dragón de las Hespérides (en latín Draco Hesperidum).
En la antigüedad Gaia (la madre tierra) había regalado a Hera reina de los dioses como regalo por sus bodas con Zeus un árbol de manzanas doradas, Hera apreciaba tanto ese árbol que puso a las Hespérides y a Ladón como encargados de cuidar el árbol para que nadie robara las hermosas manzanas.
Tiempo después llego hasta las cercanías del jardín de las Hespérides Hércules el héroe quien venia a cumplir con su onceava tarea que era robar precisamente unas manzanas de aquel árbol, le habían aconsejado pidiera ayuda a Atlas el Titán encargado de cargar con la bóveda celeste y así lo hizo, Atlas acepto pero temía a Ladón por lo que Hércules lanzo una flecha hacia el jardín matando al gran dragón. Una vez muerto Ladón Atlas dejo la bóveda celeste sobre los hombros de Hércules y entro al jardín de las Hespérides por las manzanas, cuando finalmente regreso le dijo a Hércules "tu quédate aquí un momento yo iré a entregar las manzanas", Hércules de inmediato entendió que Atlas trataba de engañarlo para dejarlo en su lugar y hábilmente ideo un plan •"de acuerdo pero sostén un poco la bóveda para que yo pueda acomodarme la piel del león que llevo en la espalda para acolchonar el peso" atlas acepto y en cuanto Hércules se vio liberado del peso salió corriendo con las manzanas sabiendo que Atlas no podía seguirlo.
Cuando finalmente Hera fue informada del robo y de la muerte de su fiel guardián la diosa decidió poner a Ladón entre las estrellas como un homenaje a su fiel servicio.
