Ikki sí milagrea, igual que los demás, solo que llega a las batallas con mayor poder que el resto.
Contra Shaka, de empezar siendo humillado, terminó, por pura suerte, aumentando su Cosmos hasta empatar el nivel del Caballero de Virgo, y era un poder momentáneo, Ikki lo sabía, por eso recurrió a una explosión de energía para llevárselo a otra dimensión, donde quedó inconsciente debido a todo el desgaste.
Contra Mime también empieza siendo inferior, pero conforme avanza la batalla, consigue empatar al Dios Guerrero y ganar, aunque esto se debe, hay que decirlo, a que Mime se quitó su God Robe para pelear justamente.
Contra Kanon, Ikki termina en el suelo tras recibir la primer Explosión Galáctica, pero su nivel aumenta inmediatamente al grado de terminar deteniendo con las manos una segunda de éstas.
Contra Aiacos inicia siendo claramente inferior, mordiendo el polvo en varias ocasiones y teniendo que recurrir a atacar a traición al Juez de Garuda, pero el mismo Kanon menciona que el Fénix se levanta más fuerte en cada ocasión, así, al final, termina superando el nivel del Espectro, claro que también con la ventaja del Puño Fantasma.
En la Obertura del Cielo, Teseo domina a Ikki, pero al final, el Fénix tiene el poder suficiente para desintegrarlo.