Ahora sí voy a responder como se debe. No tengo que pensarlo dos veces para saber cuál es mi pelea favorita de esta franquicia, sin dudas para mí la mejor de todo Saint Seiya.
Hyperion del Ebano contra Aiolia de Leo.
No solo por el trabajo dibujo y secuencias de acción que tienen de todo incluido; combate cuerpo a cuerpo, estrategias, técnicas, ser impredecible, tensa, dinámica, lo tiene todo, sino también el más que elaborado desarrollo de ambos personajes y el contexto para su combate final. Aquellos que comenzaron la nueva titanomaquia son quienes también tienen el deber de terminarla.
Hyperion demuestra cómo un Dios debe ser; rechazando el puesto de Dios de un nuevo mundo para seguir manteniéndose firme a sus creencias, como protector de su pueblo, sus camaradas y su Dios. Aparece frente a los Santos de Oro, contra los 5 a la vez, los acorrala y reta a que le hagan frente, donde Aiolia da un paso al frente. Después de tanto tiempo, combates, etc, en vez de despreciar a Aiolia, lo respeta como guerrero y lo encara como tal al ver su determinación y comprender que es un igual, un Santo que lucha por motivos justos.
Aioria pasa de ser un rebelde que odia a sus pares a ser un Santo completo que ha madurado. Lucha por su gente, por su diosa y para que ya no sufra nadie más. En medio del combate, comprende a Hyperion y desea que todos algún día puedan entenderse, aunque sabe que no es posible. Sin importar si es un Dios, lo respeta por lo fuerte que es y forma una amistad con él, ya que ambos son guerreros que buscan proteger a su gente.
Primero como enemigos que se oponen para defender lo que creen, pasando a ser rivales, a comprender al otro y finalmente terminar desarrollando un lazo de amistad y respeto. La pelea está llena de acción, es muy movida y, incluso estando formato manga, se representa muy bien el dinamismo. Tiene una duración precisa, ni es corta ni se extiende demasiado, te mantiene al tanto en cada viñeta.
Hasta se ríen de la emoción de la batalla, porque no hay ni malos ni buenos, solo guerreros.
Cuando su pelea está casi por terminar, Pontos interrumpe, pero es cortado por Hyperion quien rechaza su control. Decide encomendar sus sueños y voluntad a Aiolia, por lo que en medio de las lagrimas, concluyen su combate con la caída de Hyperion. El mejor personaje de Saint Seiya.
No hay duda alguna de que este es uno de los mejores momentos de la franquicia. Por eso aunque sea una vez en la vida, deben leer Episode G, por más que a Megumu-Sensei le den crisis de artista y no termine las cosas como debe.
Lo siento pero tenía que postear los scans. Es una maravilla. Las enseñanzas finales de Hyperion y de Aiolia son muy buenas.
Una joya de la franquicia.
Luego hago otro post con mis peleas favoritas de cada serie respectivamente.