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Zephar, Señor de los Infiernos


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38 respuestas a este tema

#1 Vulcanus no Kentha

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Publicado 06 noviembre 2016 - 19:13

Zephar

Señor de los Infiernos

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¡Pronto!


Editado por Vulcanus no Kentha, 04 enero 2017 - 13:20 .

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#2 ALFREDO

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Publicado 06 noviembre 2016 - 20:57

Kenta que bueno que regresaste, te deseo mucha suerte en tu nuevo proyecto.

 

Nos vemos por tu fic o el mio.

 

Saludos.


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FANFIC: La condenación de los caballeros de Athena

Capitulo final N°66.- Publicado!

Fichas de personajes


#3 The King of Style Strong

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Publicado 08 noviembre 2016 - 14:08

Cómo cuando miras un personaje Oc con cierto parecido a Kirito de Sao y con un nombre parecido de un ex-almirante de One Piece

Suerte

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#4 Patriarca 8

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Publicado 10 noviembre 2016 - 17:06

mucha suerte en tu fic


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#5 Vulcanus no Kentha

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Publicado 11 noviembre 2016 - 01:12

Kenta que bueno que regresaste, te deseo mucha suerte en tu nuevo proyecto.

 

Nos vemos por tu fic o el mio.

 

Saludos.

Gracias ALFREDO! Nos vemos pronto por tu fic :D 

Cómo cuando miras un personaje Oc con cierto parecido a Kirito de Sao y con un nombre parecido de un ex-almirante de One Piece

Suerte

hahahahhahahahha efectivamente el traje es de Kirito, eso es en lo único que este personaje esta inspirado en él; no quiero que Zephar tenga una personalidad tan... odiable xD lo de one piece no lo entiendo, nunca lo he visto ): espero que te des una visita por este fic ^^ 

 

mucha suerte en tu fic

Gracias T-800 nos vemos pronto por mi gran deuda con la batalla de los 1000 dias, ¡no hay dia en que piense como terminó!

 

Novedades sobre "Zephar, Señor de los Infiernos"

 

Personajes Principales:

 

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Zephar: Un joven de quince años cuya misión es devolver la espada de Jaigidel a su portador original para poder salir de los infiernos en los que se encuentra cautivo. Para esto tendrá que cruzar los nueve círculos del inframundo y llegar hasta el purgatorio, lugar donde está su objetivo. Durante su viaje descubrirá desconcertantes verdades que lo harán dudar de su cometido e inclusive de su propia identidad.

 

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FurFur: Compañera de viaje de Zephar. Una chica despreocupada e infantil. A pesar de su apariencia, resguarda un increíble poder que sacará al protagonista de más de un apuro. Su presencia afecta la memoria de Zephar haciéndole ver visiones sobre una realidad que pondrá en jaque su aventura.

 

 

...ambos pondrán su máximo esfuerzo en recuperar su libertad...

...pero un enigmático enemigo hará hasta lo imposible por impedirlo...

 

 

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#6 Ivan de Virgo

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Publicado 11 noviembre 2016 - 07:06

Le estas poniendo empeño

Mucha suerte

Ya nos estaremos leyendo


Saludos

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#7 The King of Style Strong

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Pos me gusta que te estés basando en la Divina Comedia es un plus que en lo que leído los fic de este foro nadie a usado aún digo que la nombre del protagonista es como el nombre de un ex-almirante de One Piece llamado Zephyr

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#8 Patriarca 8

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Publicado 11 noviembre 2016 - 16:55

me agradaron las fichas de los personajes

 

ojala este prota no sea tan vago como Kentha  XD

 

 

http://saintseiyafor...alcaesto/page-4


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#9 girlandlittlebuda

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Publicado 12 noviembre 2016 - 11:28

Hola compañero Kentha!

Paso a realizarte la más cordial invitación para que participes en el 1er Concurso de fan fics titulado "Una Navidad con los golds saints".

Te dejo el link para que cheques la convocatoria

http://saintseiyafor...s/#entry2392660

Espero te animes a concursar.

Mucha suerte en tu fic "Zephar señor de los infiernos".

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"Aunque nadie puede volver atrás y hacer un nuevo comienzo, cualquiera puede comenzar a partir de ahora y hacer un nuevo final"


#10 Vulcanus no Kentha

Vulcanus no Kentha

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Publicado 15 noviembre 2016 - 11:55

Le estas poniendo empeño

Mucha suerte

Ya nos estaremos leyendo


Saludos

Muchas gracias por pasar Ivan, espero que te guste esta pequeña obra :D

 

Pos me gusta que te estés basando en la Divina Comedia es un plus que en lo que leído los fic de este foro nadie a usado aún digo que la nombre del protagonista es como el nombre de un ex-almirante de One Piece llamado Zephyr

Oh ya veo, le daré un vistazo a ese zephyr, quizás su nombre esté basado en lo mismo que Zephar. Espero que te guste este pequeño paseo por los infiernos de Dante :)

 

me agradaron las fichas de los personajes

 

ojala este prota no sea tan vago como Kentha  XD

 

 

http://saintseiyafor...alcaesto/page-4

Quedan muchas sorpresas sobre Zephar, sobre si parece o no a Kentha.... bueno, ya verás xD

 

Hola compañero Kentha!

Paso a realizarte la más cordial invitación para que participes en el 1er Concurso de fan fics titulado "Una Navidad con los golds saints".

Te dejo el link para que cheques la convocatoria

http://saintseiyafor...s/#entry2392660

Espero te animes a concursar.

Mucha suerte en tu fic "Zephar señor de los infiernos".

Gracias por la invitación, ante cualquier novedad te avisaré :D

 

Última actualización antes del primer capítulo

 

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El primer enemigo al cual se tendrá que enfrentar Zephar será este enigmático minotauro el cual es conocido como el "dios" del mundo en el cual el protagonista está sumergido. En su centro una extraña luz dorada brilla resplandeciente ¿Será esa luz su debilidad? ¿O será la fuente de un misterio aún mayor?

 

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Para poder vencer en su batalla, se le otorga a Zephar esta demoníaca máscara roja, la cual según su creador, posee mágicos poderes que lo defenderán en su arriesgada aventura.  


                                           if0ldt.png
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#11 Patriarca 8

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Publicado 18 noviembre 2016 - 15:25

estan geniales tus fans art


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#12 The King of Style Strong

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Publicado 19 noviembre 2016 - 14:42

XD vale me gusta mucho pero ese fanart de medio cuerpo de ese demonio se parece a Cronos de Percy Jackson y el mar de los monstruos

Espero mucho ya que me gusta en cierto sentido la Divina Comedia

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#13 Vulcanus no Kentha

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Publicado 05 diciembre 2016 - 22:41

Respuesta a los comentarios:

Spoiler
 

 

Buen día compañeros, aquí les dejo el primero de diez capítulos de ¡Zephar, Señor de los Infiernos! La extensión será la misma en casi todos, como pueden ver no es una historia muy larga pero si tiene bastante cariño. Sobre la trama... no les revelaré nada, sólo les dejo un FanArt al final para que lo vean. Un abrazo.

 

I

 

«Sombras pasan a mi alrededor, rápidos torrentes oscuros se acercan amenazando mi cuerpo. Se apoderan de mi personalidad… esta cambia. ¿Qué he hecho? Tengo mucho miedo ¡Por favor no se acerquen! ¿Por qué me encuentro en este lugar? Apenas puedo moverme e intentar mirar a los espectros que me atemorizan.

 

Una espada surge desde el abismo. Una intimidante serpiente negra se transforma en mi aliada. Sus ojos rojos penetran las tinieblas y me hacen sentir poderoso. De pronto aquellas criaturas se arrodillan ante mí, me reconocen como su señor ¿Quién soy yo? ¿Por qué tengo el respeto de estos seres llenos de maldad?

 

Demonios más grandes aparecen, un haz de luz dorada cubre mi cuerpo, pero me rechaza… se torna escarlata. Siento como si en mis manos estuviese el poder de los dioses, deseo combatir. Ya no tengo miedo, anhelo la destrucción de todo lo que me rodea. Un ardor llameante recorre mi cuerpo y funde el campo de batalla.

 

Un hombre se manifiesta a lo lejos, parece cansado. Me invade… un profundo dolor. ¿Por qué siento pena cuando lo veo? Las lágrimas corren por mis mejillas sin saber el motivo. Él… ¿Acabará con mi vida? ¿Quién es ese guerrero que puedo ver perdiéndose en el horizonte oscuro?»

 

—¡Despierta Zephar! ¡Ya no queda tiempo! —Gritaba un alto y delgado anciano vestido con una larga bata blanca mientras desconectaba al joven de decenas de máquinas.

 

Pero el muchacho cuya edad no superaba los quince años, no reaccionaba.

 

—¡El gran demonio viene en camino! —Insistió— si no te marchas ahora ¡Todo estará perdido!

 

La visión de Zephar estaba muy nublada, como si estuviese saliendo de un sueño de siglos. —¿Qué… es esto?— Preguntó aún sin recuperar su consciencia.

 

El sujeto que lo acompañaba puso su mano izquierda en el abdomen desnudo del rubio adolescente y le provocó una fuerte descarga eléctrica que lo hizo gritar de dolor.

 

—No hay tiempo para explicaciones, un demonio viene a acabar con tu vida y debes huir de aquí cuanto antes —. Entonces tomó un pergamino y lo introdujo en uno de los bolsillos de un abrigo gris.

 

Aun sin entender nada de lo que estaba sucediendo, se puso los ropajes que estaban dispuestos para él y sin despedirse comenzó a correr por la gran mansión en la que se encontraba, cual cachorro perdido buscaba sobrevivir de cualquier forma.  

 

El lugar parecía interminable, entre más avanzaba más habitaciones iba descubriendo. Hasta que se detuvo en una que estaba abierta y en cuya puerta tenía tallado “Sala de Fur-Fur”. Sintió un peculiar frío en la espalda que lo hizo detenerse. Todo estaba muy caótico, ni siquiera él mismo entendía lo que estaba sucediendo, no obstante, por algún extraño motivo decidió entrar en aquella cámara.

 

Era casi idéntica a la pieza en la cual se había despertado hace unos minutos atrás. Un pequeño salón hecho de madera lleno de dispositivos tecnológicos que escapaban a su comprensión. Al asomarse, vio a una niña… de su misma edad, desnuda sobre su lecho. Su cabello era largo y rojo y apenas tapaba sus redondos pechos en los cuales Zephar no podía desviar la mirada.

 

El cuerpo del joven temblaba, no sabía si sentía una gran alegría o una profunda tristeza, independiente de eso aquella mujer le provocaba un ardor en su corazón.

 

«Ella es demasiado… hermosa»

 

Sin entender el motivo y tan sólo con verla; el muchacho de ojos azules comenzó a llorar desconsoladamente. Un nudo en la garganta le impidió respirar con normalidad.

 

«¿Por qué siento esto? ¿Quién eres tú?»

 

Esta vez, fijó su vista en los labios de la pequeña; quería besarla para calmar su llanto. Pero un fuerte temblor hizo que la gran casa retumbara. Entonces la desconectó rápidamente de los cables y aparatos que la tenían cautiva y cubriéndola sólo con su sábana, la cargó en su hombro derecho y siguió con su camino buscando la salida.

 

Entrando en una repentina desesperación, Zephar le dio una gran patada a cada una de las paredes que se interponían en su camino, destruyéndolas y así logrando abrirse camino hasta la salida.

 

Una vez fuera, el asombro nuevamente se apoderó de él. El cielo estaba teñido de un color entre verde y negro. No había ningún sonido ni rastros de vida en la cercanía. Aquella gran construcción parecía estar en medio de la nada.

 

No había tiempo para pensar, desde lejos una extraña criatura venía a una impresionante velocidad. Era un minotauro hecho de piedra fundida, solo la mitad superior de su cuerpo salía desde la tierra.

 

Desde el balcón de la mansión el calvo anciano llamó su atención. —No permitas que vea tu rostro. Si lo hace ¡Morirás de inmediato!—. Entonces extendió su mano derecha e hizo aparecer un extraño polvo rojo alrededor del rostro del adolescente.

 

—¿Qué debo hacer ahora? —Preguntó Zephar algo asustado.

 

—Tan sólo ordénalo ¡Invoca tu máscara!

 

Cerrando sus ojos un par de segundos, el rubio guerrero se concentró y repentinamente, la máscara de un demonio rojo de materializó en su rostro. Dos grandes cuernos nacieron desde su frente y otros dos pequeños apuntaban hacia su boca la cual poseía enormes dientes afilados. Sus ojos fueron cubiertos por una sombra negra y una corta melena blanca nació desde la parte trasera de la cubierta. Esto lo dejó oculto en el anonimato.

 

Aun así, estaba paralizado por el miedo, nada de lo que estaba viviendo tenía sentido alguno. Sin basilar, acudió a un pozo que se encontraba sólo a unos pasos y luego de introducirse con cuidado, dejó a la chica.

 

Al volver a la superficie, el monstruo ya parecía estar frente a él. Al verlo de cerca pudo notar que en su centro brillaba una intensa luz dorada que al mirarla directo, resplandecía a tal punto de provocar una ligera ceguera.

 

Este animal, al ver al anciano en el balcón, emitió un aterrador rugido. Entonces levantó su brazo derecho. Junto a ese movimiento la temperatura del ambiente empezó a subir rápidamente.

 

«¿Qué porqueria significa todo esto? ¿Debo enfrentarme a esta cosa?»

 

La tierra alrededor del demonio de piedra comenzó a temblar y a desprenderse del suelo, para ubicarse justo sobre su mano derecha, formando una gran masa rocosa la cual se  fundió hasta tornarse en una ardiente esfera de lava prensada.

 

Zephar sintió el miedo en carne propia, si aquel demonio atacaba, su vida se acabaría en un instante. En ese momento, el minotauro lanzó su poderoso ataque, pero su objetivo no fue el joven que estaba frente a él, sino la mansión en donde se encontraba hasta hace unos minutos.

 

Al estrellarse el orbe contra la gran casa, el invasor empuñó su mano, provocando que todo fuese destruido con una explosión de tierra llameante.

 

El guerrero de abrigo gris sentía que no tenía esperanzas, era tanto el temor que sentía que ni siquiera se preocupó por el destino de quien hace sólo unos momentos le había advertido sobre la presencia de este invasor.

 

Pero no tenía tiempo para pensar, debía enfrentar a esta bestia de cualquier forma posible. Casi por inercia, se paró firmemente en el suelo y adoptó una rígida pose de combate. ¿Por qué sabía cómo luchar? Eso ni siquiera él lo entendía.

 

Dando fuertes pisotones en el suelo, el adolescente logró desprender la tierra cercana a él y con tensos desplazamientos de sus brazos, la envió con mucha fuerza directo a su oponente.

 

Pero el minotauro sólo con un par de puñetazos pudo destruir la ofensiva de su enemigo.

 

«No hay forma alguna de que pueda vencer este combate... »

 

Entonces el gran monstruo levantó dos rocas desde el suelo y se las lanzó a su víctima, quien habiendo descubierto su dominio sobre la tierra, pudo imitar la última reacción de su oponente y con una gran determinación partió en decenas de pedazos aquel ataque.

 

Pero la fuerza de aquel demonio era enorme, el joven guerrero parecía estar resignado a perder, miraba hacia todos lados intentando pensar en algo, sin embargo, nada se le venía a la mente.  Una gran frustración nació en su corazón.

 

«No entiendo nada… ¡No recuerdo nada de mi pasado! No sé que estoy haciendo aquí, ni cómo he llegado. En este momento lo único que sé… ¡Es que no voy a morir en este lugar!»

 

Pensó en la chica que estaba en el pozo, una serie de imágenes sin sentido aparente vinieron a su memoria. Esto provocó que se decidiera a protegerla sin motivo alguno. Sintió el fulgor de una energía abrasante recorrer todo su cuerpo. Entonces un sublime brillo dorado lo rodeó lentamente.

No sabía lo que era pero lo estaba aceptando, de alguna forma sabía que ese polvo estelar lo haría más poderoso. Aldebarán, la estrella principal de la constelación de Tauro brilló ante la voluntad de Zephar y le concedió su don sagrado.

 

En cosa de segundos, una pesada armadura dorada se acopló perfectamente a la silueta del adolescente de ojos azules. Tenía grandes hombreras puntiagudas, una pechera ancha y un casco con dos grandes cuernos los cuales al estar sobre su roja máscara, le daban un aspecto demoniaco.

 

La vestidura mágica al reconocer a su nuevo portador, se volvió de un color rojizo brillante. Ante el escenario incendiado en el que se encontraba, Zephar caminó hidalgamente hacia su adversario.  

 

El minotauro quedó muy impresionado —¿¡Cómo es posible!? Se escuchó desde su corazón.

 

—¿Acaso puedes hablar? Preguntó el guerrero de Tauro. Pero no tuvo respuesta.

 

Entonces una nueva batalla comenzó, lanzándose con todo, el rubio guerrero embistió a la bestia, logrando moverla de su eje. Pero esta no se quedaría atrás y se enfrentaría fieramente a su oponente.

 

Por un instante dejaron de lado el control de la tierra y sólo los puñetazos fueron los protagonistas de este combate. Ambos estaban muy igualados, sin embargo, fue ahí cuando un brillo desde el centro del cuerpo del minotauro comenzó a brillar.  

 

De un momento a otro, el animal rocoso adquirió una nueva fuerza y fue capaz de derribar al soldado escarlata con un puñetazo. Luego poniendo ambas manos sobre el suelo, comenzó a fundir la tierra que lo rodeaba y la manipuló como si de un líquido fundido se tratase, envolviendo a su adversario en un vórtice ígneo.

 

El grito de dolor de Zephar demostró lo dañado que había quedado luego de aquella ofensiva.

 

«¿Cómo es posible que  ni siquiera con esta gran armadura pueda hacerle frente? Realmente no hay forma de que pueda vencer

 

Entonces descubrió que una oscura espada estaba acoplada a su armadura. En la empuñadura de esta arma sobresalía la cabeza de una serpiente con dos alas y unos ojos rojos que al tomarla, brillaron intimidantes.

 

—Que sea mi última carta ¡Veremos quién de los dos es más fuerte!

 

Entonces volvió a lanzarse contra su adversario. Utilizando la espada negra intentó cortarlo por la mitad, pero las rocas que rodeaban su cuerpo eran demasiado duras y no pudo cumplir con su cometido. No obstante, le provocó una gran herida la cual fue regenerada con la tierra cercana.

 

Por un momento, al descubrir aquella parte del dorso de su enemigo, le pareció ver una pierna dorada. —¿¡Quién eres tú realmente!? Preguntó desafiante. La única respuesta que escuchó fue una extraña risa la cual parecía bastante humana.

 

Nuevamente el minotauro tomó la tierra cercana, la fundió y atacó a su oponente con la esfera que había formado, derribándolo sin problemas.

Este golpe dejó casi inconsciente al rubio guerrero. Entonces desde el pozo un pequeño ruido se hizo oír, se trataba de la joven que había estado ahí por algunos minutos.

 

—¿Qué es todo este escándalo? Reclamó, como si estuviese saliendo de un sueño.

 

Entonces el demonio la vio y quedó paralizado. —¡Maldito Hefestos!— Gritó desesperado. Golpeando fuertemente el suelo con su brazo derecho una y otra vez, se dio la vuelta y se marchó de aquel lugar.

 

Desconcertado y de rodillas en el suelo, Zephar se quedó mirando el cielo verdoso mientras tanto su máscara como su armadura se desvanecían como polvo por el viento.   

 

—¡Hola! —El sonriente saludo de la muchacha lo intrigaba aún más. ¿Cómo era posible que después de todo lo sucedido se mostrara tan alegre?

 

—Hola… ¿Quién eres? —respondió el guerrero con los ojos medio cerrados.

 

—La verdad… ¡No lo sé!

 

«¿Qué le sucede a esta niña? ¿Acaso está loca?»

 

Al ponerse de pie, el pergamino que había sido puesto en su abrigo se cayó.

 

“Zephar, si lees esto es porque ya no estoy ni en este mundo ni en el otro.

Espero de todo corazón que hayas podido escapar.

Seré breve ya que no tengo mucho tiempo.

Eres mi discípulo, un paladín de tierra, prodigio desde el primer momento.

Lamentablemente hace poco fuiste derrotado por un demonio.

Al perder, te envió al infierno, donde te encuentras ahora.

Cruza los nueve círculos y encuentra al dueño de la espada de Jaigidel.

Sólo así saldrás de tan inhóspito lugar y recuperarás tus recuerdos.

Confío en ti, paladión de Tauro.”  

 

Luego de leer aquella nota, el joven comenzó a caminar en línea recta —¿Y tú? ¿No vienes?— Le dijo a la pelirroja.

 

—¿A dónde vas?

 

—No lo sé… pero veré la forma de salir de este lugar.

 

—Eh… ¡Espérame! —Gritó mientras seguía a pasos rápidos a su nuevo compañero de viaje.   

 

 

¡FanArt del Capítulo!

 

Spoiler

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Publicado 07 diciembre 2016 - 15:33

1:

 

 

-ese sueño me recuerda  un poco a los sueños que tenia Kentha con la ballena gigante

 

-que me late que el ardor no solo era en su corazón.....................XD

 

-asi que se encuentran en el infierno eso explica en parte el ambiente caotico

 

-al mencionar a los paladines-----me pregunto si los personajes de tu otro fic seran

 

mencionados en algunas ocasiones

 

-Fue un capitulo un tanto caótico pero también intrigante

 

 

PD:

 

Mucha suerte en este fic y ojala pronto actualices el otro


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Publicado 10 diciembre 2016 - 16:39

Pos me gusta tienes un buen concepto y una idea clara de tu historia

Espero que siga y no la dejes sin terminar mira que hay algunas en ingles que fueron épicas y las dejaron sin continuar

Suerte y pos Tenemos al toro rojo XD

Si quieres un poco de inspiración puedes leerte algunos comic de Vértigo

Cómo Sandman que tiene contenido muy interesante y Está ligado al cristianismo osea Está Lucifer Morningstar y Michael Morningstar sin contar que toca temas filosóficos muy buenos

Editado por The King of Style Strong, 10 diciembre 2016 - 16:41 .

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#16 Vulcanus no Kentha

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Publicado 15 diciembre 2016 - 01:54

1:

 

 

-ese sueño me recuerda  un poco a los sueños que tenia Kentha con la ballena gigante

 

-que me late que el ardor no solo era en su corazón.....................XD

 

-asi que se encuentran en el infierno eso explica en parte el ambiente caotico

 

-al mencionar a los paladines-----me pregunto si los personajes de tu otro fic seran

 

mencionados en algunas ocasiones

 

-Fue un capitulo un tanto caótico pero también intrigante

 

 

PD:

 

Mucha suerte en este fic y ojala pronto actualices el otro

Verás bastantes similitudes entre Kentha y Zephar ¿tienen alguna explicación? Tendras que seguir leyendo para saber hahhahahahaha

Efectivamente el ardor puede darse en muchos lugares del cuerpo ahhahahahahahha

Este capítulo siii es algo caótico y es que suceden muchas cosas sólo porque si o que aparentemente no tienen explicación, pero todo se irá resolviendo a medida que pasen los capítulos.

Prefiero no spoilear sobre si Zephar y el Mito del Alcaesto tienen algo en común, lo dejaré como factor sorpresa 

Gracias siempre por leer compañero, pronto actualizaré el mito del alcaesto.

 

Pos me gusta tienes un buen concepto y una idea clara de tu historia

Espero que siga y no la dejes sin terminar mira que hay algunas en ingles que fueron épicas y las dejaron sin continuar

Suerte y pos Tenemos al toro rojo XD

Si quieres un poco de inspiración puedes leerte algunos comic de Vértigo

Cómo Sandman que tiene contenido muy interesante y Está ligado al cristianismo osea Está Lucifer Morningstar y Michael Morningstar sin contar que toca temas filosóficos muy buenos

Que bueno que te guste amigo, esa es la idea que se pase un pequeño rato agradable. 

El fic ya lo tengo escrito, sólo me falta hacerle las correcciones, asi que a menos que me ocurra algo grave xD esta historia no quedará inconclusa.

¿Por qué la armadura de Tauro es roja? Falta poco para averiguralo ahhahahahaha

Gracias por las recomendaciones ¿será que veremos al mismisimo lucifer rondando por estos lugares? gracias por el comentario :D

 

No sé si está prohibido subir este tipo de fanart (espero que no), lo dejaré como spoiler, es Fur-Fur usando el atuendo con el que se le describe en el primer capítulo. En pocos días subiré el siguiente capítulo donde Caronte llevará a los protagonista ¡Al primer círculo del infierno! Un abrazo para todos. 

 

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                               FanFiction: Zephar, Señor de los Infiernos


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Publicado 15 diciembre 2016 - 18:25

no se porque pero tengo el extraño  presentimiento de que a varios

 

de este foro les gustaria ver animado este fic algun dia---- :ph34r: XD


Editado por T-800, 15 diciembre 2016 - 18:25 .

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Publicado 16 diciembre 2016 - 12:32

De nada si escribes algo que entretiene lo mínimo para un creador de fanfic y lector de fanfic como yo debe ayudar a mejorar o darle inspiraciones para que logre un mejor desarrollo

Respecto a Lucifer recuerda que Lucifer es el Angel Caído que intento derrocar a Dios y Satanás o Diablo es un Demonio como tal es decir son dos seres completamente diferente

Cómo te digo Sandman esta ligada a la Divina Comedia y puede ser una gran fuente de inspiración

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Publicado 22 diciembre 2016 - 15:02

Respuesta a los comentarios:

 

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II

 

—¡Detengan el combate!

 

—¿Qué está pasando aquí?

 

—¡Se trata de este imbécil! Ha simulado una invasión movilizando inútilmente a nuestras tropas, le ruego expulsarlo del torneo.

 

—¡Sáquenlo de aquí!

 

«¿Soy… yo? ¿Quién es ese joven moreno que se enfrenta a mí? ¿Por qué dicen que soy un tramposo?»

 

Apenas podía abrir sus ojos por el cansancio. El cuerpo le pesaba como si hubiese recibido una paliza. Sintiendo un calor muy placentero en su cuerpo, Zephar despertó entre los brazos de su compañera.

 

—¡Ya despertaste bebé! —la pelirroja sonreía mientras tenía al guerrero entre sus brazos.

 

—¿Dónde… estamos? —al mirar hacia el lado vio junto a su rostro los redondos pechos de la niña. Por lo que se levantó de golpe, muy sonrojado.

 

—¿Te sucede algo?

 

—¿Si me sucede algo? ¡Mírate! Estás desnuda.

 

—¡No estoy desnuda! —se quejó apretando su pequeña boca— tengo puesta esta sabana.

 

—Esa cosa no te tapa nada, además es transparente, en ese caso mejor no lleves nada puesto.

 

—¡Bueno si tú quieres! —en tan sólo un segundo, arrojó lejos su única prenda quedando totalmente descubierta.

 

—¡No lo decía enserio! —exclamó Zephar a punto de desmayarse por tal escena. Tomando nuevamente la sábana, se acercó hacia su compañera.

 

—¿Cómo me quedé dormido?

 

—Fácil. Caminamos y caminamos y caminamos, después caminamos y caminamos hasta que caíste al suelo.

 

—¿Sólo caí? —aquella pregunta fue interrumpida por un estruendo que hizo que ambos elevaran la mirada hacia el horrible cielo verde oscuro, en el cual no se podían apreciar ni las estrellas ni la Luna— es verdad… según el papiro, estamos en el infierno.

 

—Pensé que me llevarías a la salida y sólo hemos andado en línea recta ¡Al parecer no sabes nada del camino! Vaya porqueria de acompañante que tengo.

 

—¡Mide tus palabras niña! Le estás hablando a un prodigio.

 

—¿Un prodigio?

 

—Si… eso dice el pergamino —aseguró riendo.

 

Sacando el papel desde su abrigo. Ambos leyeron detenidamente lo que allí estaba escrito.

 

—Veamos —agregó el joven— aquí dice que el anciano de la mansión era mi maestro. Estaba muy apurado escribiendo esto, ya que señala que no tenía mucho tiempo. Otra cosa, es que soy Zephar, un paladín de tierra… o sea, que puedo controlar la tierra. Fui derrotado por un demonio ¿Será el minotauro con el que me enfrenté? Bueno… sea quien sea, me envió donde estamos ahora, el infierno, que está compuesto por nueve círculos y una vez que los pase encontraré al dueño de la espada de Jaigidel —el escuchar ese nombre le hizo tomarse una pausa— ¿Por qué no simplemente me dijo su nombre? ¿De qué me sirve saber que es el dueño de esa espada? ¿¡Dónde encuentro esa espada!? Por último dice que si lo encuentro podré salir de aquí y recuperar mi memoria.

 

Al mirar a su compañera, comprobó que no estaba a su lado, sino bastantes metros más allá.

 

—¡Oye tú! ¡Ni siquiera me estabas escuchando! —Reclamó enojado.

 

—¡Mira! —señaló dando pequeños saltitos— hay un lago a lo lejos ¡Vamos! Apúrate.

 

—Al menos, ¿Podrías decirme tu nombre?

 

—No tengo la menor idea de cómo me llamo.

 

Al escuchar eso, tomó consciencia de que ambos estaban en punto de sus vidas en el cual no tenían retorno, sólo una misión que afrontar con la gran desventaja de no saber ni siquiera quienes eran ellos mismos. —Cuando te encontré, decía en la puerta de la habitación “Sala de Fur-Fur”

 

—Entonces llámame así —concluyó con una tierna sonrisa.

 

—¡Está bien Fur-Fur!

 

Al correr por algunos minutos, le hicieron frente a una inmensa masa de agua de oscuras tonalidades. La muchacha siempre se mostraba contenta, pero aquella escena deprimente invadía el corazón de Zephar.

 

—Por un lado tenemos el extraño color del cielo —mencionó el paladín de tierra— y por otro estas siniestras aguas, no es la mejor forma de comenzar un viaje. 

 

—Bueno… sólo nos queda una cosa por hacer; cruzar a la otra orilla.

 

Ya estaba listo para regañar a Fur-Fur por lo ilógica de su propuesta, cuando de pronto, desde el horizonte donde el cielo parecía fundirse con el mar, se asomó una pequeña balsa de madera rodeada por una espesa niebla. De inmediato extendió su brazo derecho invocando su espada con cabeza de serpiente, preparándose para cualquier enfrentamiento.

 

Dentro de la embarcación estaba de pie un alto demonio cubierto por una túnica negra que resaltaba su semblante enfermizo. Era delgado y estaba cubierto por escamas verdes que contrastaban con su blanca pero sucia barba. Dos alas de murciélago salían de su espalda, estas parecían estar gastadas por el tiempo.

 

—¡Qué sorpresa!  —exclamó el siniestro sujeto— no recuerdo cuando fue la última vez que vi seres con vida en este lado del río Aqueronte.

 

—¿Quién eres tú? —preguntó desafiante el guerrero.

 

—El olor que ustedes tienen… —continuó, ignorándolo— que peculiar, ¿Quiénes son? Parecen bastante humanos. Mi nombre es Caronte y soy el barquero del infierno.

 

—¡Queremos cruzar! —exigió Fur-Fur con una sonrisa.

 

Zephar tomó firmemente su espada pensando que el demonio se enojaría ante tal osadía.

 

—No hay problema. En verdad, los vi de lejos y… para eso me acerqué.

 

—Que bueno… —respondió la muchacha ordenándose la sábana que usaba para cubrir su cuerpo, a la vez que se acostaba en el bote.

 

El paladión de Tauro ya se estaba desesperando, la actitud irresponsable de su acompañante los ponía en un gran peligro.

 

—¡Antes de partir! —interrumpió— el viaje no será gratis.

 

—¿Qué deseas? —preguntó el joven manteniendo su postura seria.

.

—Una rama dorada, es la paga por cruzar a los vivos.

 

—¿Rama dorada? No tengo nada de eso…

 

—¡Entonces que la muchacha se baje!

 

—¡Zephar! —reclamó la pelirroja— ¿Hay algo más que puedas ofrecerle?

 

—¡No acepto nada más! —no obstante,  al ver el arma que estaba portando el guerrero cambió drásticamente de parecer— a menos que sea… esa espada.

 

El muchacho la miró por unos segundos como si estuviera pensando en aquella propuesta —si nos llevas a un lugar seguro, es toda tuya— concluyó. Y luego de darle el objeto pedido se sentó al lado de su compañera. Al incorporarse también Caronte, la balsa comenzó a andar.

 

—¿Cómo haces para que se mueva sin remar? —preguntó Fur-Fur.

 

—Son mis ayudantes los que hacen el trabajo por mí.

 

Entonces miró hacia abajo y vio cientos de cadáveres fantasmagóricos cargando la barca. Si se concentraba un poco, podía escuchar los lamentos de aquellos seres. Tal imagen la dejó aterrorizada, por lo que abrazó fuertemente a su acompañante buscando su protección.

 

—Tranquila… —añadió con una sonrisa— todo está bien.

 

—Tengo miedo —le dijo susurrando— este lugar es horrible, al igual que esa criatura, su barba es asquerosa.

 

—Estamos seguros aquí, eso es lo que importa.

 

—¿Me lo prometes?

 

—Mientras estés conmigo, nada malo te sucederá.

 

Fuertemente abrazados continuaron con su viaje a bordo de tan enigmático transporte.

 

Pasaron un par de horas en las que Caronte no le quitaba la vista de encima a la espada recién recibida. —Me carcome la curiosidad ¿Cómo un escuincle como tú pudo obtener la espada de Jaigidel?

 

«¡Así que esa es la espada de Jaigidel! la que debemos entregar a su dueño para salir de aquí» —Eso es un secreto, ahora es tuya, no hay más preguntas.

 

Llegando a la otra orilla, pudieron ver una gran ciudad que parecía estar solo a unos pasos, la cual a pesar del lugar en el que se encontraban… se veía muy normal.

 

—Aquí los dejo.

 

—¿Qué es este lugar? —Preguntó el paladín de ojos azules.

 

—El primer círculo del infierno, Canaán. Aquí están aquellos que no han sido bautizados.

 

—¿En serio? ¿Sólo por qué no han sido bautizados? Que estupidez más grande.

 

—No se refiere precisamente a eso… pero ya están aquí, no hay más preguntas.

 

Penetrando en las calles por la oscura noche, descubrieron que efectivamente aquel lugar estaba densamente poblado. Pasaron entre la gente de forma tan apacible que por un momento dudaron de si estaban realmente en el infierno.

 

—¿Qué hacemos ahora? —preguntó Fur-Fur ordenándose la sábana para no mostrar sus partes íntimas.

 

—Lo primero es buscarte algún vestido. No quiero que nadie vea tus pechos, son sólo míos.

 

A pesar de tal atrevimiento, sólo sonrío y se dispuso a seguir a Zephar a donde sea que fuese. Caminaron eternos minutos visitando cada lugar de Canaán. Las casas, el comercio, e incluso las plazas recreativas… todo lucía totalmente común.

 

—Lo único extraño que he visto hasta ahora —aseguró el guerrero— es que todo está muy activo para ser de noche.

 

Entraron en una pequeña cabaña donde, según los letreros de la entrada, vendían tejidos de todo tipo. Al instante salió un hombre gordo vestido con una camisa de cuadros y un sombrero de paja.

 

—¡Hola! —saludó cordialmente Zephar— buscamos ropa interior y un atuendo para la señorita aquí presente.

 

—Adelante —respondió el dueño de forma cortante, haciendo un gesto para que la chica entrase a una sala llena de ropa.

 

Estuvo ahí por al menos una hora, hasta que salió usando un elegante vestido blanco, tenía descubiertos los hombros y un grueso listón anaranjado en la cintura. Al verla, el joven lloró nuevamente. La situación le parecía cada vez más desagradable, no entendía por qué siempre al ver de forma romántica a Fur-Fur, las lágrimas caían por sus mejillas.

 

—Te ves realmente preciosa —le dijo con una tiernamente.

 

—¡Lo sé! —respondió riendo mientras se miraba al espejo.

 

—Muy bien —interrumpió el vendedor— serían dos óbolos.

 

—¿Óbolos?

 

—Por supuesto ¿O crees que el vestido es gratis? 

 

«Es cierto… debe referirse a la moneda de este lugar. Hemos venido sin pensar que no traemos dinero» —La verdad es que no tenemos óbolos en este momento. Pero necesitamos ese vestido, por lo tanto, le puedo ofrecer algo de un valor mucho más elevado.

 

—¿Qué sería? —preguntó intrigado.

 

Zephar introdujo su mano derecha en su abrigo gris. La movió por un par de segundos y luego sacó hacia la luz la espada de Jaigidel. —Te ofrezco esto, como ves tiene hermosas piedras incrustadas en los ojos de la serpiente y una grande en el hocico.

 

—Eh… si… puede ser. Trato hecho —Intentaba disimular lo alegre que estaba, debido a que era una transacción que lo beneficiaba enormemente.

Rápidamente la pareja salió de aquel lugar.

 

—No me habías dicho que tenías más de una espada.

 

Zephar soltó grandes carcajadas —sólo tengo una— afirmó aun riéndose.

 

—¿Entonces? no entiendo nada.

 

El paladín de tierra extendió su brazo derecho y concentrándose un pequeño instante, materializó nuevamente su arma. —¿Ves? Siempre que lo desee, volverá a mí.

 

—¡Entonces estafaste a Caronte y al vendedor!

 

—Son detalles… y hablando de detalles, se me acaba de ocurrir una muy buena idea.

 

Recurriendo al mismo método, vendió su espada en distintos lugares de Canaán. Obteniendo una bolsa de buen tamaño llena de Óbolos.

 

—Podemos hacer lo que queramos ¿Qué te parece si nos divertimos un poco?

 

—¿No tenías que entregarle esa espada a su dueño para salir de aquí?

 

—¿Realmente quieres salir de aquí? La verdad yo estoy disfrutando de esto ¡No seas amargada!

 

—Está bien… pero sólo hasta mañana.

 

—¿Sólo hasta mañana? ¡Por favor! A mí nadie me dice lo que tengo que hacer. Si quiero quedarme aquí para siempre, lo haré. ¿Qué importa el dueño de la espada? ¡Ahora su nuevo dueño soy yo!

 

Un tanto resignada, la pelirroja lo acompañó por algo de comer y después, buscando algún lugar solitario, consiguieron llegar hasta una construcción semejante a un templo en ruinas. Era una obra pequeña y tenía varios pilares blancos hasta la mitad.

 

—Aquí no parece haber alguien más —aseguró Zephar— así que podremos descansar unos minutos.

 

Entonces se acostó apoyando su espalda en una de las columnas. En seguida Fur-Fur se sentó sobre sus piernas.

 

Sintiendo el trasero de la joven encima de su cuerpo, el paladión no pudo esconder su vergüenza —¡Oye! ¿Por qué eres tan osada?— le preguntó como si estuviese asustado.

 

—¿Te molesta?

 

—No… sólo que me parece extraño, porque no te conozco. Ni siquiera nos conocemos a nosotros mismos.

 

—Eso es cierto, pero tú eres lo único que tengo. Y… me siento feliz estando contigo.

 

Aquellas palabras conmovieron al muchacho quien abrazó fuertemente a su pareja. —No sé quién soy pero ¿Sabes algo? No me interesa. En verdad ni siquiera esta misión me interesa. Estando contigo también soy feliz. ¿Te parece si desde ahora sólo somos tú y yo? ¡Que nuestra historia comience desde aquí en adelante!

 

Tan pronto terminó de pronunciar las últimas palabras, la chica tomó su cabeza y le dio un beso apretado. Se miraron por un par de segundos, sonreían como si se conociesen y estuviesen enamorados desde siempre. No había estrellas en el cielo, pero el brillo en sus ojos era suficiente para iluminar aquel momento.

 

Estuvieron horas besándose en aquella construcción deteriorada. Era tan fuerte la pasión entre ellos que no podían dejar de acariciarse y decirse el uno al otro lo mucho que se querían. Zephar introdujo su mano por debajo del vestido de la pelirroja y comenzó a desvestirla.

 

Pero fuertes pisadas interrumpieron sus intenciones. Dos gigantes cíclopes de musculosa contextura y piel roja se manifestaron frente a la pareja.

 

—¿¡Quiénes son ustedes!? —Preguntó agresivo mientras se ponía al frente.

 

Pero los monstruos no respondieron. Mostrándose de inmediato con intenciones de combatir, uno de ellos atacó a Zephar con un puñetazo en el pecho, derribándolo en el acto.

 

Los deseos por proteger a Fur-Fur eran aún más intensos luego de aquel encuentro amoroso. Exhalando aire ardiente, un brillo carmesí cubrió el cuerpo del rubio paladín. La armadura de Tauro ya estaba acoplada a su cuerpo.

 

Un golpe en el suelo levantó un gran bloque de piedra, junto a rígidos movimientos lo lanzó en contra del cíclope atacante quien a pesar de recibirlo pudo mantenerse de pie. Pero el paladión no le dio tiempo de reaccionar; un puñetazo en el rostro por la derecha seguido de otro por la izquierda fue suficiente para hacerlo caer.

 

El otro demonio se dirigía a atacar a la joven. Esta vez Zephar levantó su brazo derecho con la palma mirando hacia el cielo. Desde el suelo una garra hecha de piedra fundida tomó al monstruo como prisionero.

 

Entonces el guerrero empuñó con esfuerzo su mano, provocando la misma reacción en la extremidad recién forjada. Esto destruyó al cíclope cautivo, mientras que el otro estando de pie, recibió una brutal embestida del toro rojo, quedando fuera de combate.

 

—¡Escuchen criaturas monstruosas! —exclamó al viento— a Fur-Fur nadie se le acerca, si alguien desea hacerle daño, le declararé la guerra yo mismo ¡Zephar, Señor de los Infiernos!     

 

Desvaneciendo su armadura, comenzó a caminar de regreso a Canaán —¡Vamos!— le ordenó seriamente a su pareja.

 

—¿A dónde?

 

—Tú lo dijiste, nuestra misión es encontrar al dueño de la espada. Te prometo amor, que cueste lo que cueste ¡Te sacaré de este lugar!

 

¡FanArt del Capítulo!

 

Spoiler

Editado por Vulcanus no Kentha, 22 diciembre 2016 - 15:04 .

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#20 Patriarca 8

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Publicado 22 diciembre 2016 - 15:59

jajaja-ese sueño creo que ya he visto como 5 versiones de cuando se dio esa trampa 

 

 

me extraña que Zephar se queje del "peculiar atuendo" de su compañera 

 

 

Para mi que el maestro estaba borracho cuando escribió que era un prodigio-XD

 

“Sala de Fur-Fur”-------------menos mal que no decía otra cosa----XD

 

 

la habilidad de esa espada es muy buena

 

 

PD:Son geniales,tus fan art-no te olvides de actualizar tu otro fic que también es muy bueno


Editado por T-800, 22 diciembre 2016 - 15:59 .

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