Prólogo. ♥
Todo el pequeño pueblo de Rodorio estaba en llamas, se incendiaban todas las casas, locales, todo se consumía por las llamas. Sí, era un ataque de algún sirviente del inframundo. Fuimos rápido a ayudar pero al llegar el espectro ya no se encontraba
-¿Qué hace un espectro aquí en Rodorio?- Dijo Aioria preocupado.
-Este ataque no fue algo casual- Respondió Milo con un tono seco mientras miraba el pueblo.
-¿Crees que ya esté cerca?- Dijo Aioria
Nadie pudo contestar ya que escuchamos a mucha gente pidiendo ayuda, y nos tuvimos que dispersar para poder ayudar.
Iba recorriendo las calles para ver si alguien necesitaba ayuda, hasta que escuché como alguien gritaba para pedir ayuda, salí corriendo para ver de donde venían esos gritos y vi que venían de una casa toda derrumbada por el fuego.
-Alguien ayúdeme, por favor- Se escuchaba una voz de una pequeña
Entré a esa casa hecha escombros y ahí vi a una niña de aproximadamente 13 años.
-¿Estás bien?- Le pregunté mientras empujaba partes de techo para poder pasar.
-Sí, creo que sí pero mi pie está atrapado, no lo puedo sacar.
-A ver, te sacaré de ahí.
Comencé a quitar los escombros que estaban encima de su pie y la cargué para poder sacarla.
-¿Cómo te llamas, pequeña?
-Kora, Kora Onisse. Oye, eres un caballero dorado- Dijo sorprendida y dando una sonrisa.
-En efecto, soy Mu de Aries.
-¡No puedo creerlo, estoy hablando con un Dorado!
-Jajaja, claro pequeña. -Al salir de la casa nos alejamos un poco de ahí y la bajé para sentarnos en el piso. -Oye, Kora, ¿Y tus papás?- pregunté
-Ellos... ellos... Murieron a manos del tipo ese feo que atacó el pueblo- Agachó su cabeza y comenzaron a brotar le algunas lágrimas. -¿Crees que regrese? Tengo miedo de que venga.
Quedé en shock al escuchar sus palabras, no puedo creer que haya quedado sola después de este ataque. De la nada sentí un inmenso cosmos emanar de ella, un cosmos sorprendentemente grande. ¿A caso será ella?
-No te preocupes, Kora, yo te cuidaré de ahora en adelante- La abracé.- Vamos, irás conmigo al santuario- La cargué de nuevo para empezar a caminar en dirección al santuario.
-¿En serio cuidarás de mi?- Me miró asombrada y con mucha ilusión.
-Claro, estarás conmigo, yo te defenderé- Le sonreí
-Sabes, yo siempre quise tener una armadura y luchar para cuidar mi pueblo. - Me miraba con una ilusión en sus ojos.
-Iremos con Athena y hablaremos con ella.- Me iba a contestar escuche como alguien me hablaba.
-Mu, aquí estás. Es hora de volver a...- Se quedó viendo a Kora un poco esxtrañado. -¿Quién es ella?
-Hola, me llamo Kora Onissen.- Dijo sonriendo.
-Mucho gusto Kora, sooy Shaka de Virgo- Le devolvió la sonrisa
-Ella se irá con nosotros al santuario.- Dije
-Perfecto, nosotros te vamos a cuidar- Shaka le sonrió
Empezamos a caminar en dirección al santuario. Shaka y yo íbamos hablando tranquila hasta que me di cuenta de que Kora se había quedado dormida.
-Shaka, tengo que decirte algo.- Dije recordando
-Dime, Mu.
-Cuando saqué a Kora de ese lugar hecho cenizas, pude sentir un inmenso cosmos.-
De pronto Shaka paró en seco, y me giré para verlo
-No querrás insinuar que ella es...-Dijo algo dudoso
-No sé, pero este cosmos no es de un cabalero normal, este cosmos puede superar el de nosotros juntos.
-No digas esas cosas Mu, quizá haya sido un poco de tu imaginación- Miró al suelo por unos minutos -A ver, te ayudo- Le di a Kora para que el la cargara
Shaka Pov's
Será posible que ella sea la... no, claro que no, es una niña de ¿qué será?, ¿trece años?, En fin, no creo que sea posible eso, quizá toda esta situación le afecto un poco a Mu.
Llegamos al santuario y decidimos llevarla con Athena para que nos dijera que pudiéramos hacer.
Caminamos hasta la casa de la Diosa, tocamos la puerta y ahí estaba ella. Recostamos a Kora en un sillón y nos arrodillamos ante Athena.
-Señorita Athena, hicimos lo que nos pidió pero llegamos tarde- Dije con la cabeza agachada.
-Casi todo el pueblo fue destruido por las llamas que se causaron, y por lo que nos dijeron, eran espectros- Habló Mu.
-Entonces era cierto lo que sentí- Dijo Athena mirando en dirección a la ventana- Hades empieza a despertar. Tenemos que poner al tanto a los demás caballeros. Gracias, pueden retirarse
-También quiero comentarle algo. Encontré a una niña de 13 años. Quedó sin hogar y su familia murió en el ataque, ¿qué podemos hacer con ella?
Athena permaneció callada por unos minutos, miró en dirección al sillón donde se encontraba Kora y volvió su vista a nosotros.
-Siento algo en ella... Algo inexplicable...
-¿Qué sugiere, Señorita?- Dije
-Entrenenla, todos, mañana daré la noticia a Milo, Aioria y Aldebarán. Mu, llévala contigo a dormir, es a ti a quién supongo conoce más.
Después de eso nos dirigimos a la salida sin antes que Mu tomara a Kora en sus brazos.
-¿Viste que no fui el único que sintió algo diferente en Kora?- Mu me sonrió
-No sé, quizá haya sido la preocupación, ya sabes que Athena es muy buena y se preocupa por todos.
-Yo sé que no es así, querido amigo.- Soltó una pequeña risita -Nos vemos mañana Shaka, descansa.
Después de eso cada quien se fue por su parte.